El Liverpool empata y el Bournemouth arrolla al Chelsea
Los 'red' no pudieron pasar del empate ante Leicester y desaprovecharon el tropiezo ayer del City. Los de Sarri salieron goleados y ya están fuera de los puestos Champions.
Jornada aciaga para los grandes de la Premier League. Del llamado top six tan solo han ganado Arsenal y Tottenham, mientras que Liverpool, Manchester City, Manchester United y Chelsea pincharon de una u otra forma. Los reds se dejaron dos puntos contra el Leicester en Anfield después de que Maguire igualase el tempranero tanto inicial de Mané a los tres minutos de juego en un encuentro marcado por el frío y la escarcha que poblaban el campo (1-1).
Los líderes aumentan, eso sí, la distancia con los citizens, pero ven cómo los spurs se acercan a siete puntos después de que los de Pochettino estuviesen a punto de perder contra el Watford en Wembley. Por suerte Son ha regresado al equipo después de que Corea del Sur cayese contra Catar en la Copa Asiática y consiguió empatar el encuentro en el minuto 80, aunque fue Llorente el que se convirtió en el héroe del partido conectando un remate de cabeza marca de la casa para remontar el partido a dos minutos del final (2-1).
El que no tuvo tanta suerte, o directamente, ninguna suerte, fue el Chelsea, al que ni siquiera la llegada de Higuaín parece cambiarle la cara de equipo plano al que solo salva Hazard. El Bournemouth, conjunto que nunca había ganado a los blues en el Vitality Stadium y que llevaba tres victorias en las últimas trece jornadas de Premier League, aplastó sin miramientos al conjunto de Sarri gracias a dos goles y una asistencia de Joshua King, que sigue haciendo méritos para dar el salto a un club de más categoría la temporada que viene (4-0).
El Chelsea ya ha perdido la cuarta posición en favor del Arsenal, que sí que consiguió vencer ayer, y ha pasado de pelear por la liga a estar fuera de los puestos que dan acceso a la Liga de Campeones. La salida de Morata, al que muchos culpaban de los males del equipo, ha dejado al descubierto las carencias del club de Stamford Bridge, que salió goleado de un encuentro en el que atesoró el 70% de la posesión y que vuelve a destapar la distancia cada vez más evidente entre entrenador y vestuario.