Solari, errores de Lopetegui
En Ipurua volvió a proteger a Bale, el equipo se le cayó tras el descanso, no supo sustituir a Casemiro... Con el argentino, el Madrid sigue siendo frágil en Liga.
El 3-0 en Ipurua cayó como un martillo sobre el efecto Solari. Una derrota sin paliativos que trajo a la memoria algunos de los problemas y errores que le costaron el puesto a Lopetegui. En su primer partido tras firmar la renovación como entrenador del primer equipo hasta 2021, el Madrid volvió a la andadas...
Bale, el eterno protegido.
Se quejó en Kiev, pidiendo jugar siempre. "Tengo que jugar todos los partidos", dijo Bale, aupado a la chilena con la que le marcó el Liverpool. Desde el 19 de septiembre, sólo un gol. Seis partidos más con Lopetegui, en sequía. Solari llegó avisándole públicamente, pidiéndole más, pero no se ha atrevido a sentarlo. En Ipurua, pese a los números desastrosos del 11 madridista ante el Eibar (21 pérdidas de balón, sólo diez pases en campo rival...), le mantuvo los 90 minutos. Solari también tropieza con la piedra del galés.
Ceballos, extraña solución.
El esguince de tobillo de Casemiro en Vigo amenaza con ser una tortura también para el nuevo técnico madridista. Lopetegui quiso ubicar ahí a Kroos y el alemán se negó. Solari apostó ante el Eibar por Ceballos, un futbolista que venía revalorizado del parón FIFA. El utrerano fue superado una y otra vez. Solari, como Lopetegui, renunció a contar con un pivote puro como Marcos Llorente (que no fue ni convocado y se irá en enero) o Valverde.
Sin reacción al descanso...
No hubo, por lo que se vio en el campo, Solarina al descanso. Aunque Mendilibar le había desmontado tácticamente, con una presión asfixiante, Solari no supo qué hacer aprovechando esos quince minutos para reorganizar el equipo. Le pasó a Lopetegui, por ejemplo, a Lopetegui en Moscú (1-0). También en el Pizjuán, con tres goles en la primera mitad (3-0). Solari no sólo no levantó al Madrid, es que el Eibar le marcó en el minuto 51 el 2-0 y el 3-0 sólo cinco después...
...Ni en los cambios.
El primer cambio puramente táctico la derrota ante los armeros fue ya con 3-0. En el minuto 62, Isco por Modric. Antes había entrado Carvajal por el lesionado Odriozola. La entrada de Vinicius en el 73' por Asensio no cambió nada. Un guiño estético que apenas beneficia al brasileño y que vuelve a poner presión sobre Asensio, que no da el paso. Una cierta inmovilidad en los cambios que también mostraba Lopetegui.
Un equipo "sin actitud".
El Madrid que había despertado con exhibiciones como el 0-5 en Plzen, no apareció ni por asomo en Eibar. "Cuando no tienes actitud pasan estas cosas", fue la autocrítica de Ramos. El Madrid vuelve a defender con la fragilidad que mostraba en la era Lopetegui. No se vieron "los cojones (sic)" que demandó Solari antes de ir a Melilla. Este Madrid de la 2018-19 no recibía tantos goles (19) a estas alturas desde hace justo diez años. Cinco de esos, en las dos últimas salidas blancas (Vigo y Eibar). El Madrid tenía apagones con Lopetegui y los tiene con Solari.