A la hora del vermú habrá fútbol en Zorrilla y la atención estará centrada en los banquillos (sigue el partido en directo en As.com). Dos técnicos que por merecimientos están ya en el olimpo de los entrenadores más queridos en Valladolid. Mendilibarconsiguió un ascenso meteórico (2006-07) batiendo todos los récords y sostuvo a aquel Real Valladolid dos temporadas en Primera antes de ser destituido en la tercera. Fueron tres años y medio como blanquivioleta. En el banquillo local ahora está Sergio González, técnico milagro, entrenador que cogió a un equipo deprimido en abril, lo ascendió y sorprende a propios y extraños en la máxima categoría. Sin embargo, como del pasado no se vive, ambos entrenadores tienen clara la importancia del duelo de esta mañana. Para los pucelanos, después de la injusta derrota en el Bernabéu, el encuentro ante el Eibar supone la oportunidad de volver a la senda del triunfo o, al menos, de seguir sumando. Seis jornadas consecutivas llevaban los blanquivioletas puntuando hasta el sopapo de Chamartín. Los armeros, por su parte, vienen con la moral alta tras remontar al Alavés (2-1) en el último encuentro y con la intención de mantener una línea regular. En sus cinco salidas perdieron tres partidos, empataron uno y ganaron en Gerona (2-3).
En el Real Valladolid no se esperan muchos cambios. La única duda está en saber si el técnico devolverá al once a Óscar Plano para que acompañe a Enes Unal o seguirá apostando por el argentino Leo Suárez y repetirá por cuarta vez alineación, ya que el resto del once blanquivioleta será el mismo. El Eibar, por su parte, llegará a Valladolid tras un loco derbi ante el Alavés. La roja a De Blasis supone una baja notable en el ataque armero, aunque Hervías haya demostrado de lo que es capaz ya esta temporada. También podría entrar Sergi Enrich y cambiar la formación de 4-3-3 a 4-4-2, en un equipo que no ha repetido once inicial todavía en toda la Liga.
Partido, por tanto, de estilos contrapuestos, de entrenadores míticos, en el que ambos contendientes saben que se la juegan ante un rival directo.