Ander Garitano, director deportivo desde hace cuatro años, encomendó el pasado verano a Manolo González el banquillo del Club Deportivo Ebro. El técnico gallego tenía por misión mantener al equipo arlequinado en Segunda B y también que hiciera disfrutar a los 300 abonados del club en la Copa del Rey hasta donde le llegaran las fuerzas a sus pupilos. Al menos la segunda premisa la puede dar por bien cumplida (sigue el partido en directo en As.com). Ellos, los 300, más otros miles de aragoneses que asistirán al partido, harán que La Romadera sea por un día el estadio del Ebro, en un detalle de buen vecino del Real Zaragoza con la entidad del barrio de La Almozara.
La buena nueva de Marcelino es la vuelta de Santi Mina. El gallego está recuperado y nunca está de más refuerzos para una delantera enfadada como está la suya con el gol (solo 8 goles entre Liga y Champions). Mina se lesionó hace mes y medio y aprovechará esta ronda para ponerse a tono. Él, los menos habituales de Marcelino, llámense Jaume, Murillo o Lato, y también cuatro futbolistas del filial que pueden tener su estreno oficial: Alex Blanco, único extremo zurdo nato con el que viajará hoy Marcelino a la que fuera su casa y que curiosamente ya le marcó al Ebro hace pocas fechas con el Mestalla; Kangin Lee; Hugo Guillamón, que aprieta por llegar, y Uros Racic, el ‘Vinicius’ del Valencia, un jugador que costó dos millones, el doble del presupuesto del CD Ebro.
