NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

REAL MADRID - ATLÉTICO DE MADRID

Derbi bipolar: apagón en el Madrid y subidón en el Atlético

El Atlético del Cholo vuelve a la normalidad (dos partidos sin encajar goles) y el Madrid a las andadas (arranques en frío y ganduleo general).

Mariano, Vinicius, Vallejo, Keylor, Lucas Vázquez, Ceballos y Marcos Llorente, en el banquillo del Sánchez Pizjuán el pasado miércoles.
Mariano, Vinicius, Vallejo, Keylor, Lucas Vázquez, Ceballos y Marcos Llorente, en el banquillo del Sánchez Pizjuán el pasado miércoles.Javier Gandul

Un doble golpe de viento de cola, en Leganés y en Sevilla, ha devuelto al Atlético a la Liga. Con tan sólo cuatro jornadas disputadas, se vio a siete puntos del Barcelona y a cinco del Madrid a dos partidos del derbi. Una derrota en el Bernabéu era pena mayor. Ahora puede acabar la semana por delante del vecino si es capaz de ganarle mañana.

De repente, todo ha vuelto a la normalidad en el Atlético. Apoyado en un calendario favorable, no ha encajado un gol en los dos últimos partidos, piedra sobre la que Simeone ha edificado su proyecto, tomó impulso ganando en Mónaco y ha ganado para la causa a Koke, que ante el Huesca acaparó casi el 20% de los pases totales del equipo. Cuando el partido pasa por él, el Atlético se siente capacitado para la elaboración.

También ha ido recuperando lesionados (Kalinic, Arias o Vitolo; sólo Savic sigue de baja) y parece que llegará a tiempo Giménez, que se retiró el martes con una sobrecarga.

En números rojos sólo anda Diego Costa, que desde que regresó sólo ha marcado tres goles en LaLiga y el último data de febrero. De aquello se han cumplido ya 19 encuentros, aunque al Madrid le hizo un doblete en la Supercopa de Tallin. El derbi es el partido más repetido en su carrera (12, con cuatro tantos). No está el Madrid entre sus siete víctimas preferidas. A Griezmann no le ha ido mucho mejor, aunque sí anotó ante Rayo y Huesca. Y la sensación es Lemar, al que Simeone ha perdonado el curso de aclimatación en el banquillo prescrito para todo recién llegado.

Al Madrid, en cambio, le coge el partido tras un apagón inesperado en Sevilla, donde emergieron los peores defectos de los peores momentos de la era Zidane: el desmayo de salida, la falta de presión, la distancia entre líneas, un repliegue caótico y una preocupante falta de actitud. Días así sólo eran capaces de esconderse tras los goles de Cristiano. Y todo, una semana después de firmar ante el Roma el partido perfecto. Dos jugadores resumen el corte de línea: Marcelo y Benzema. Fuera de punto, el lateral exagera sus desatenciones defensivas. Cantó en la Supercopa y por su lado llegó el gol del Athletic y el vendaval de Navas. No le ayudó descansar ante el Espanyol. Parece difícil que se recupere de su lesión (hoy se somete a pruebas médicas). A día de hoy su baja no es la peor noticia posible, más si se recupera Carvajal, lo que haría viajar a Nacho a la izquierda.

Tan en seco como el equipo ha frenado Benzema. Marcó cinco goles en los cuatro primeros partidos y lleva ahora otros cuatro de abstinencia. Anda en fase gato. La baja de Isco le quita al Madrid inventiva y superioridad en el centro del campo y Asensio sigue en la montaña rusa que le lleva del sobresaliente al suspenso, vaivenes que no están permitidos a los primeros espadas.

El efecto colateral de la derrota en Sevilla es que devolvió a la actualidad debates recurrentes (la portería y Vinicius), el exceso de competencias que se ha autoimpuesto Ramos y hasta el nivel del banquillo. El Pizjuán dejó registros preocupantes: sólo tres remates a puerta, una bajada de ocho puntos en la posesión (del promedio de 68% al 60%) y un mal balance en las recuperaciones de los centrocampistas (23-19 para el Sevilla). El derbi decide si estamos ante un mal día o el inicio de una mala racha.

ClasificaciónPTSPGPEPP
Clasificación completa
Próximos partidos
Calendario

ClasificaciónPTSPGPEPP
Clasificación completa
Próximos partidos
Calendario