Las dos caras de Dembélé

La temporada de Ousmane Dembélé está siendo muy distinta para él cuando juega con su selección y cuando juega con su club. Con su país está perdiendo galones pero con el Barcelona se está haciendo cada vez más importante.

Y es que con Francia, el extremo estaba acostumbrado a alternar la titularidad y la suplencia desde que se recuperó de su lesión y volvió a ser llamado por Didier Deschamps. Eso fue a finales de marzo. Entre ese día y el comienzo del Mundial jugó cinco encuentros (dos de titular) y anotó un gol.

Su recuperación fue como la seda y eso le valió no solamente para ir con Francia al Mundial. Además, fue titular en el debut ante Australia. Pero su importancia en el equipo fue cayendo y en la fase de grupos fue suplente ante Perú y titular contra Dinamarca en el último encuentro de la fase de grupos. Ya no se volvería a ver más al jugador galo en la fase eliminatoria salvo los dos minutos testimoniales ante Uruguay que le dieron en los cuartos de final. Un caso parecido al de David Silva en 2010, cuando España ganó el Mundial de Sudáfrica.

Francia ganó el Mundial y llegada la Liga de Naciones, Deschamps convocó prácticamente a la misma plantilla que lo hizo posible en verano, pero Dembélé tuvo 24 minutos ante Alemania y 2 ante Holanda, sustituyendo a Olivier Giroud en ambas ocasiones contra dos rivales poderosos. Una muestra de que tiene por delante a Antoine Griezmann y Kylian Mbappé, dos cracks que le cortan el paso en la selección.

Pero si con Francia está perdiendo peso en el equipo, con el Barcelona lo está ganando. No hay más que ver su rendimiento. Su primera temporada se puede considerar de adaptación, llegando con la etiqueta de estrella y toda la presión de cubrir el hueco dejado por Neymar a pesar de su corta edad. Su tempranera lesión no le ayudó en absoluto e incluso se le llegó a cuestionar por su gusto por la comida basura, aunque ya parece haber cambiado sus hábitos alimenticios. 24 partidos, 4 goles y 9 asistencias fue su balance de la campaña pasada, partiendo diez de esas veces desde el banquillo y completando tan sólo tres encuentros.

Este curso, Ernesto Valverde le está dando la confianza que necesitaba y su rol está siendo cada vez mayor. Es obvio que Leo Messi es la estrella del equipo y el encargado principal de desatascar los partidos, pero cuando esto no es posible por el exceso de defensores marcándole, Dembélé es al primero que se recurre. Sin ir más lejos, el galo es el jugador de la Liga Santander que más toques dentro del área rival lleva esta temporada. Suma 32, por delante de su compañero Luis Suárez (27) y de Sergi Enrich, del Eibar (21).

Aunque solamente ha completado un encuentro en lo que va de campaña, ha sido titular en los cuatro partidos del conjunto azulgrana (tres de liga y uno de Supercopa de España), marcando un tanto en todos los partidos a excepción del encuentro ante el Alavés. Se le ve con más descaro y seguridad a la hora de encarar a sus rivales que a finales del curso pasado y se está notando que cada vez se entiende mejor con Messi y Suárez.

Así pues, Dembélé casi se podría considerar un fichaje para Ernesto Valverde, mientras que para Didier Deschamps es un suplente de lujo que de momento no tiene sitio con los cracks de Atlético de Madrid y PSG en plena forma. Habrá que ver cuál de esas dos caras triunfa a final de temporada.