Williams pasa con nota la tempestad

Pese al empate sobre la bocina del Huesca, el mazazo de no vencer, pese a adelanterse 2-0, no debe empañar en absoluto la excelente actuación de Iñaki Williams, que muy motivado después de una semana agitada a vueltas con el famoso vídeo de la Aste Nagusia, se salió con cabalgadas, desbordes, dos asistencias en los goles de Susaeta y Berchiche y dos balones estrellados a la madera, que coronaron una actuación a la que solo le faltó el broche del gol. Por cierto, que el delantero suma cuatro maderas en los últimos seis partidos de Liga.

Un Williams que además actuó de 9 en la alineación del Athletic para suplir la lesión muscular de Aduriz y que de saque ya demostró que podía ser su partido. El público de San Mamés le recibió además con aplausos bastante generalizados. Ha entendido sus disculpas públicas. Pleno de facultades, no se arredró pese a que de extremo se suele desenvolver con mayor soltura. Con Pulido encima se sacó de la chistera un remate cayéndose desde la frontal del área que estrelló al palo derecho de un Werner ya batido.

En el primer gol de Susaeta le asistió un balón franco sin ser egoista, y en el de Yuri Berchiche también intuye en la asistencia la mejor solución para desatascar la nutrida defensa del Huesca. El lateral zurdo, de tiro mordido, se estrenó en el capítulo goleador e hizo estalar San Mamés. Tras la tempestad, Williams, eléctrico, buscaba la calma que sin embargo empañó el parte el talento del Huesca arriba. Williams acabó muerto por el esfuerzo, con las medias bajadas, se había vaciado sin encontrar el camino del gol, pero seguramente reencontrándose a sí mismo.

El propio Berizzo ensalzó el partido de Williams: "Muy bueno, encontrandose de espaldas, asociándose; ha generado peligro, en la segunda parte más asistido. Jugó un partido muy bueno", remató el técnico argentino.