Toca concurso de méritos para los culés en el Levi’s Stadium
Lenglet, Arthur y Malcom, a ganarse un puesto para la Supercopa en el final de la gira ante un viejo grande, el Milán (02:05, beIN Sports).
Después de casi dos semanas de peripecias por la costa oeste de Estados Unidos, de Oregón a California pasando por Texas, el Barça cierra la gira en Santa Clara, corazón del Silicon Valley. En el Levi’s Stadium se mide al Milán (sigue el partido en directo en as.com), una entidad gigantesca metida en el fango hace una década. Ganador de siete Champions y con un palmarés adornado por más de 50 títulos, no reina en Europa desde 2007 y el TAS le ha salvado a última hora de la humillación de no jugar Europa League la próxima temporada por incumplir las normas del fair play financiero. En su road trip por América, el Barça ha perdido a Digne, rumbo al Everton, y a André Gomes y Denis, lesionados. En cambio, ha ganado a Ter Stegen, incorporado a la disciplina del equipo en Dallas, y a Malcom, que se ha adaptado a toda velocidad y al que ya se ha visto en San José bromear con los otros nuevos, Arthur y Lenglet. El partido de hoy contra el Milán será la última oportunidad que tengan para convencer a Valverde de que deben ser titulares el próximo domingo en Tánger contra el Sevilla. De momento, los tres fichajes han dejado buenos detalles pero son futbolistas jóvenes que aún tienen pendiente el último salto. Tal vez por eso la luz verde de Valverde a un jugador consagrado, experto y que ya se sabe el libro del fútbol como Vidal. Si el club, como parece, le va a exigir la Champions, él va a querer rendimiento inmediato.
Ni Barça ni Milán han ganado partidos en la gira. Valverde lo tenía previsto en su plan. Ha priorizado jugar entre 45 y 60 minutos con un once de la primera plantilla que vaya cogiendo automatismos y ha ‘regalado’ media hora de sufrimiento a los chicos del filial para que se vayan curtiendo. Pendiente de llegar a Barcelona, donde la semana que viene se integrarán Piqué, Busquets, Alba, Messi, Suárez y Coutinho, el técnico ha insistido en los dos primeros partidos con un 4-3-3. Es difícil, sin embargo, averiguar si ese será el plan definitivo o si volverá al 4-4-2. El retrato robot de los fichajes (interiores como Arthur y Vidal y extremos como Malcom) permite pensar en un Barça más ancho este año, pero la foto del dibujo táctico sólo está revelada en el estudio de Valverde y su inseparable Jon Aspiazu.
El Milán, con Reina y Suso como representación española y más pendiente de la presentación de Higuaín que de sus andanzas por Estados Unidos, asoma con buenos jugadores (Kessie, André Silva, Kalinic) pero muy lejos de aquel equipo dominador de final de los 80 y 90 que con Sacchi y Capello peleaba con el Barça de Cruyff por la hegemonía de Europa. Qué tiempos aquellos.
