“España es un referente en economía del deporte”
Plácido Rodríguez, uno de los economistas de cabecera de As, ha sido galardonado con la tercera edición de los ‘Larry Hadley Service Award’.
Los estudios sobre economía del deporte en España están de enhorabuena, ¿no?
España, desde hace bastante tiempo, es uno de los referentes mundiales en este tema. Y en concreto, la ciudad de Gijón y la Universidad de Oviedo, que es una de las que, por el número de publicaciones, y revistas y autores, está entre las diez mejores del mundo.
¿Por qué Gijón?
Nosotros tenemos ya mucha experiencia. La Asociación Europea de Economía del Deporte va a hacer ahora su XI Congreso aquí. Hemos organizado el X Congreso de la International Association of Sports Economists (IASE) recientemente… Ya hemos hecho 13 en Gijón sobre temas distintos, y tienen algo de especial todos porque son unitemáticos. Y tienen mucha relevancia las conferencias.
¿Por eso le han premiado a usted?
Pues ha sido la North American Association of Sports Economists, que debe tener unos 400 libros, quien decidió darme un premio que se concede cada cuatro años… ¡Son como los Oscars de lo nuestro! Hay quien dice que los Oscars se dan cada año y muchos, y en esto sólo se da uno y cada cuatro años (risas). Así que imagino que es la leche.
¿Quién los recibió antes?
En 2010 se lo dieron a Elisabeth Gustafson. El premio en realidad se llama ‘Larry Hadley Service Award’. Este hombre ya falleció. Llevaba en EE UU, como yo aquí, como 30 años dedicándose a la economía del deporte. Él era miembro de la Asociación Internacional que tenía su sede en Limoge, que se creó en 1999 y de la que yo fui presidente y ahora soy presidente honorario. Pues bien, Larry Hadley, en 2008, organizaba en Ohio el IX Congreso de a IASE. Y el tío se murió a dos meses vista siendo él el factótum de toda la historia. Pues Elisabeth Gustafson, la primera premiada en 2010, era la mano derecha de este hombre, pioneros ambos en la publicación de libros de la economía del deporte en los 90, una referencia. Yo me los empapaba todos. Y ellos los editaban.
Un premio con tinte sentimental para usted...
Y tanto, porque el premio lleva el nombre de ‘los servicios de Larry Hadley’, al que me hubiera encantado conocer y no pudo ser por un par de meses. Este hombre hizo la de dios.
¿Y en 2014?
Ese año se lo dieron a Leo Kahane, que fue editor de la revista que creó la International Association of Sports Economists. Siendo una revista de sólo 18 años de vida, está en el top…
Y el tercer premio ha sido para usted…
Algo habremos hecho bien. Es por el valor de los congresos de Gijón. Las dos revistas de referencia en el sector han hecho monográficos especiales de nuestros congresos. Y ahora estamos en Málaga en el IX congreso Iberoamericano de economía del Deporte. Pues el primero también lo hicimos en Gijón.
¿Por qué es tan importante lo que hacen ustedes?
Porque tiene una gran aplicación práctica. Por ejemplo, podemos estudiar cuáles son los precios óptimos a poner para las entradas de los estadios. Para esto hay que hacer un estudio de mercado. Yo, en mi tesis doctoral, vi cuáles eran las motivaciones por las cuáles el público ocasional compra una entrada y cuáles son las motivaciones por las que las compran los socios. Este artículo, mi tesis, es el más citado en el mundo, y digo en el mundo, en el análisis empírico de la economía del deporte. Son más de 300 citas desde 2002. Y resumiendo la conclusión, por ejemplo, al occasional spectator le da igual pagar 40 o 80 euros, porque le importan las variables de calidad y quiere ver un clásico, un derbi, dos grandes presupuestos frente a frente, mientras que para el socio el precio no es relevante, ni que llueva o no. Lo que importa es la trayectoria. Si pierde varios partidos deja de ir. Y eso es impepinable.
¿Qué más aplicaciones hay?
Para evaluar el impacto económico de cualquier cosa que tenga relación con el deporte: hacer un nuevo estadio, por ejemplo…
¡No me diga que le ha llamado Florentino para la reforma del Bernabéu!
No, pero es muy sencillo. Es un tema de oferta y demanda. Quieres hacer una reforma y necesitas financiarla. Y si no te la financian, tienes que sacar el dinero de los recursos ordinarios del club, y puede que al final no puedas hacerlo porque hablamos de inversiones de cientos de millones. Es complicado.
Claro…
Se puede evaluar lo que significa para un país, región o ciudad el hecho de organizar un evento deportivo, véase Rusia ahora, o Roland Garros o el Triatlón de Valencia. Para todo eso hay análisis de impacto de beneficios económicos.
Son cosas prácticas.
Yo he hecho estudios para Gijón de cuál era el impacto de la semifinal de Copa Davis España-EE UU, o de que Gijón fuera nombrada ciudad europea del deporte 2016, el impacto del campeonato del mundo del patinaje de velocidad… Pero claro, son cosas que hay que hacer bien y con conciencia, no sólo para satisfacer al político de turno que te lo encarga.