Pau, Hernán y la cita con el Domingo de Resurrección
Espanyol y Alavés intentan enderezar un rumbo insípido (12:00, beIN LaLiga). Abelardo pierde a Ibai; Quique, salvo Diego, con su once de gala.
Fue en pleno Domingo de Ramos cuando el padre de Pau López se manifestó sobre el futuro del portero perico. “Soy del Espanyol, pero pronto seré del Betis”, indicó, mientras bendecía la palma como diácono de Amer (Girona). Y, cosas del destino, justo una semana después y a la misma hora, se vive en Cornellà el Domingo de Resurrección con el canterano de titular en la que podría ser (dependiendo de Diego López) su despedida como perico del estadio, y la necesidad por parte de Espanyol y Alavés tanto de resurgir en resultados, como de retomar en plena Semana Santa una pasión con sus fieles que se perdió por el camino (sigue el partido en directo en As.com).
Ni pericos ni babazorros sufren aprietos, pues están virtualmente salvados, por lo que la obligación de una victoria es mucho más anímica que objetiva. Por desgracia. Los de Quique Sánchez Flores vienen de una estrepitosa goleada en el Benito Villamarín (3-0), en la que además de ofrecer una pésima imagen perdieron el 99 por ciento de sus opciones de luchar por Europa. También contra el Betis cayó el Alavés en una de las tres derrotas consecutivas que ha firmado en las últimas jornadas. Es, indudablemente, la peor racha con Abelardo, quien desde su llegada nunca había encadenado siquiera dos.
Con la premisa de “volver a ilusionarse” podrá gestionar Quique a su equipo ideal, ya que solo cuenta con las bajas por lesión de Diego López y Naldo; habrá pocos retoques, acaso la entrada de Darder, ausente en las dos jornadas anteriores. Más sensible es en el Alavés la baja de Ibai Gómez por unas molestias en el glúteo que ha arrastrado durante toda la semana.
Quien sí estará en Cornellà, en el reencuentro con el club que ostenta sus derechos, es Hernán Pérez, quien en dos meses prácticamente triplica cedido en el conjunto de Abelardo los minutos que jugó con Quique hasta enero. El paraguayo, de todos modos, puede ser suplente porque viene de jugar en Estados Unidos.
Manu García espera una contestación a su contraoferta
El Alavés trasladó una oferta al capitán Manu García a principios de año. El club le comunicó que la respuesta tenía que llegar antes del día 31 de marzo, es decir, ayer. Se trataba de un ofrecimiento de renovación para dos temporadas a razón de unos 500.000 euros netos por campaña. Al jugador le parecía poca cantidad y desearía estar más tiempo en el club de su corazón. Por eso, y dentro del plazo, el agente del capitán le hizo una contraoferta al Alavés y ahora la pelota está en el tejado del club. Es un activo que podría quedarse en la entidad cuando se retire. —J. Lekuona
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