El Betis mira a Europa en la noche negra de Pau
El portero españolista, que será verdiblanco el año que viene, se comió el 1-0 local. Los verdiblancos fueron muy superiores.
Ganó fácil el Betis al Espanyol y empatan los verdiblancos con el Girona en la séptima posición, que virtualmente dará derecho a jugar en Europa, aunque los de Machín conserven la delantera por tener mejor goal-average, al menos hasta que hoy jueguen en el Santiago Bernabéu. De Girona, precisamente, era en el protagonista de la previa y lo será de las crónicas: imposible que los aficionados pericos no piensen mal del todavía portero españolista, que la próxima campaña defenderá al Betis y cantó de una manera evidente en el gol que inauguraba el marcador local...
Aunque también habría que ponerse en la piel de un chaval de 23 años que sabe que tiene todos los focos alrededor, esperando un fallo suyo para saltar. Así, con tanta presión encima, se multiplican por 100 o por 1.000 las posibilidades de pifiarla como la pifió el meta catalán. El Espanyol no perdió solamente por el error de su portero. En la jugada yerra también de manera monumental Marc Navarro, que no despeja cuando lo tenía todo a su favor. Y a eso, a despejar balones en medio del agua, se había dedicado toda la primera parte el equipo de Quique Sánchez Flores, incapaz de acercarse con peligro una sola vez al área de Adán.
Tocaba y tocaba el Betis sin demasiada profundidad pero con la convicción de que el gol llegaría mientras la luz se apagaba dos veces (por pocos segundos) en el estadio y los aspersores (a los que en Andalucía se llama 'periquitos', qué cosa) saltaban en medio del juego y de una manta de agua. Y el gol de Junior (1-0, 34') llegó.
Trató de recomponerse el Espanyol con Darder por Piatti tras el descanso. Tenía algo más de posesión el equipo perico cuando Boudebouz redondeaba su buen partido con el 2-0, desde la frontal. Esta vez no se le puede achacar nada a Pau, vendido, pero sí que volvió a escucharse algún rumor cuando Francis, minutos después, volvía a batir al meta por el centro, cuando lo que parecía iba a ser un pase al área acabó en chut.
Echarle la culpa al portero de la derrota de su equipo sería injusto. El Betis fue mejor, siempre, aunque a esta hora Pau López suscite las suspicacias de un españolismo enfadado y de aquellos béticos (la mayoría, suponemos) que piensen que el fallo (o los fallos) no provienen de su consciencia y/o nerviosismo. Esos aficionados verdiblancos que pensarán: ¿de verdad habremos hecho bien fichándolo?