Un oasis en el desierto soriano

Soria no es una plaza sencilla para el Tenerife. Allí solo se ha conseguido una victoria en once visitas mientras que tres veces se logró empatar y los siete duelos restantes (Copa del Rey incluida) fueron para el Numancia. Doce goles anotaron los insulares por 23 de los locales.

Ese oasis en el desierto numantino se produjo hace más de una década cuando el 7 de octubre de 2006 los pupilos de Bernd Kraus ganaron por 0-1 gracias a un acierto de Rubén Sánchez, de penalti.

Aquel sábado, el entrenador alemán eligió a Bernardo en la portería; Marc Bertrán Pablo Sicilia, Culebras y Clavero en defensa; Ayoze García, Óscar Pérez, Ricardo, Luis Gil en el medio; Raúl Sánchez y Cristo Marrero arriba. Desde el banquillo ingresaron Juan Ramón, San Martín y Castiñeiras.

Fue un duelo trepidante porque los tinerfeños acabaron con nueve por expulsiones de Bertrán y Ayoze y porque el meta Bernardo le desvió un penalti a Juan Carlos Moreno.

La última visita blanquiazul a Los Pajaritos fue en abril de 2017 y se igualó 1-1. El Choco Lozano había adelantado a los de Martí, pero igualó Calvo. En los dos duelos anteriores a este, hubo una lluvia de goles porque en la primera jornada de la campaña 2015/16, en agosto de 2015, el Numancia ganó 6-3, mientras que pocos meses antes habían empatado 3-3 por la última fecha del certamen 2014/15.

Se trata de un duelo contemporáneo porque el primer enfrentamiento se produjo en noviembre de 2002 ganando los locales por 1-0 gracias al gol de Cuéllar. Curioso fue el choque de marzo de 2006 porque ambos porteros titulares (Juan Pablo en el Numancia y Kelemen, en el Tenerife) se lesionaron.