Arbitraje: el Barcelona va por un lado y Piqué va por otro

Mientras Piqué abandera en solitario la cruzada arbitral, el Barça parece ir en otra dirección. Jordi Mestre, vicepresidente del Barça, desveló en los micrófonos de Movistar Plus que “hace meses” el club azulgrana ya planteó (se entiende en la FIFA) que se aplicase el videoarbitraje porque, “igual que lo hay en el rugby y en tenis, ahora que existen los medios por qué no vamos a ayudar a los árbitros y no sé por qué no va hacia delante”. Falta escuchar la voz representativa de Bartomeu pero el Barça parece posicionado firmemente en alentar la presencia del vídeo y la tecnología en los campos de fútbol.

La tesis de Jordi Mestre coincide con la de Luis Enrique, que en diciembre se mostró contundente cuando se le pidió opinión sobre la tecnología aplicada en el fútbol al hilo de la polémica que se generó en el Mundial de Clubes: “Estoy a favor del videoarbitraje. La evolución del fútbol tiene que ir por ahí. Hay que ver en qué jugadas detener el partido pero en todo lo que signifique ayudar al mundo arbitral, estoy de acuerdo. No siempre hay que echarle la culpa a los árbitros”. En 2015, sin embargo, Luis Enrique no fue tan contundente: “En este país de pandereta ya me gustaría ver a los pobres árbitros de la tecnología”.

Hay dos vías, pues, abiertas en el Barça. Una, la de la prudencia y cautela. Es el discurso oficial de ayudar a los árbitros y, para eso, valerse de la tecnología. Por la otra vía, independiente, va Piqué, crítico con el colectivo arbitral y señalando ya incluso a instancias superiores como después del partido ante el Villarreal. De hecho, esa queja le puede acarrear una sanción.