NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

GIRONA

El Girona gana fuera todo lo que pierde en Montilivi

El golazo de Rubén Alcaraz ante Osasuna sirvió para dar los tres puntos a los rojiblancos y confirmarles como el mejor visitante. Pero son el peor local de la categoría.

Rubén Alcaraz volvió a demostrar que el disparo desde fuera del área es una de sus grandes virtudes. Si en la pasada Copa del Rey, Jan Oblak lo sufrió en el Atlético-L’Hospitalet, el domingo, con la camiseta del Girona, superó a Nauzet Pérez. Su tanto bastó para sumar los tres puntos ante Osasuna, devolver la calma a Girona y situar al equipo, otra vez, más cerca del playoff que del descenso.

“Los compañeros me dijeron que fue un buen gol. Fue tras una jugada rápida, en medio del campo, Osasuna pierde la pelota y yo, sin pensármelo, miré la portería y disparé. Es una virtud que tengo y dio sus frutos. Fui el protagonista por hacer el 0-1, pero al final ganó todo el equipo y es con lo que me quedo. Eso sí, personalmente salgo reforzado”, comentó un Rubén Alcaraz que después dejó claro que el equipo “dio un paso adelante y logró una victoria muy importante”. Y lo era porque se pone punto y final a una racha de cinco encuentros sin ganar —cuatro empates y una derrota— y además permite al conjunto de Pablo Machín coger aire y confianza para poder afrontar el próximo partido en Montilivi ante el Lugo.

Porque es en casa donde tienen la asignatura pendiente. Esta temporada está siendo de contrastes y tal es así que el Girona es, tras 11 jornadas de Liga, el peor equipo de la categoría en casa (cuatro puntos) pero el mejor a domicilio (diez). Lejos de Montilivi solo han dejado de puntuar en dos encuentros de seis disputados y ello les está manteniendo. Ahora toca volver a recuperar la fiabilidad en casa para seguir escalando posiciones.

Con el Lugo empezó el mal fario en casa

El sábado ante el Lugo se puede cerrar un círculo. A lo largo de la semana será inevitable no pensar en el último encuentro de Liga de la temporada pasada cuando un tanto de Caballero en el último minuto evitó el ascenso directo a Primera del conjunto rojiblanco, pero una vez empiece a rodar el balón de nuevo, todo ello deberá quedar a un lado. Con el conjunto gallego empezó el mal fario rojiblanco en Montilivi porque desde entonces el Girona encadena siete encuentros sin conocer la victoria. Cinco de estos son de la campaña actual —son el único equipo de Segunda A que aún no ha ganado en casa— y ya han volado 11 puntos del feudo gerundense. El duelo ante el Lugo será una vendetta por lo del curso pasado —ocho jugadores que disputaron aquel duelo regresarán a Montilivi— y además, debe servir para poner fin a un inicio de temporada sin triunfos como local.