EUROPEO SUB-17
Aleñà-Pepelu: la sala de máquinas de La Rojita
La pareja titular de mediocentros volverá ante Bulgaria. "Nos llevamos bien, somos como una familia y eso lo hace todo más sencillo", dicen.
Desde que el pasado miércoles terminara su debut ante Austria, una única idea ocupa los pensamientos de los futbolistas de La Rojita: ganar a Bulgaria. Para esta complicada misión Santi Denia recupera a Pepelu, que se perdió el primer encuentro por sanción. “Desde fuera se hace muy duro verlo, es una sensación diferente”, afirma el futbolista del Levante.
Aleñà y Pepelu son la pareja de mediocentros titular de la Sub-17 y la sala de máquinas de esta Selección, los encargados de aportar criterio y equilibrio. El del Barça, además, es el capitán y líder del grupo. Así lo demostró ante Austria, con el gol que adelantó a España en el marcador y con una presencia constante en la elaboración del juego.
La Rojita acusó la baja de Pepelu, pieza clave para frenar las contras del rival y ofrecer ayudas, pero no es momento de echar la vista atrás: “Queríamos los tres puntos ante Austria, pero el equipo lo dio todo y debemos seguir en esta línea, es con lo que hay que quedarse. Ya sólo pensamos en Bulgaria”, asegura Aleñà.
Pepelu, por su parte, espera ansioso y confiado su debut en el torneo, a la vez que respeta al rival: “Un anfi trión siempre es complicado, esperamos un partido muy difícil porque ellos son fuertes y van a tener el apoyo de su público en el estadio, pero un Europeo no se juega todos los días y es nuestra obligación ganar. Tengo muchas ganas e ilusión”. Además, desde fuera pudo analizar con mayor objetividad la actuación de sus compañeros frente a los austríacos: “Tuvimos ocasiones en la primera parte para hacer varios goles, pero tras el tanto de ellos nos vinimos un poco abajo”.
Distancia. Con apenas 17 años y a miles de kilómetros, los internacionales echan de menos a sus familiares, pero lo afrontan con mentalidad positiva: “Estamos aquí porque nos gusta esto, es una experiencia muy bonita”.
El buen ambiente y las bromas son habituales en la concentración de La Rojita. “Nos conocemos mucho y nos llevamos muy bien, eso lo hace todo más fácil. Somos como una familia”, aseguran. Una familia que confía en que la sala de máquinas que forman Pepelu y Aleñà les conduzca hasta la victoria mañana ante Bulgaria.