Sanchón pone el morbo en el juicio a Mandiá

Juan Carlos Mandiá conoce mejor que nadie la montaña rusa de emociones que supone entrenar al Hércules. El técnico gallego asegura que tiene controlada cada curva, cada giro inesperado y cada cambio de brisa en el Rico Pérez. Después de tres etapas en el Hércules, es consciente de que "ahora toca una época dura". Por eso afronta con tranquilidad el juicio al que se expondrá hoy ante la hinchada herculana. El técnico gallego necesita una victoria y reconquistar una grada que anda tocada moralmente. Su tropa asegura estar con él, por lo que la reacción se da por hecha. El problema es más psicológico. Levantar la losa que supone no haber puntuado aún y ser colista es el principal obstáculo que va a encontrar hoy el Hércules.

La afición espera un cambio radical en el equipo. Si el grupo no mejora, Mandiá volverá a estar en el disparadero. Una nueva derrota le dejaría tocado, al borde del precipicio y con sólo cuatro jornadas disputadas. En el juicio al técnico gallego se cuela un invitado muy especial: Felipe Sanchón. El catalán, uno de los descartes de Mandiá este verano, quiere ajusticiar a su exentrenador con el Girona, club que sí le quiso y con el que se siente feliz tras firmar uno de los mejores arranques de su historia. Sanchón pondrá el morbo y se le espera motivado.

Pocos cambios.

Para contrarrestar el buen inicio del conjunto catalán, Mandiá mantendrá el bloque de la semana pasada. Sarpong puede ser la principal novedad en la banda izquierda, ya que Gilvan arrastra problemas. Y a todo esto, el césped del Rico Pérez tampoco ayudará. Un hongo ha dejado la hierba en pésimo estado. Pero ni al Hércules ni a Mandiá le valen las excusas.