Segundo asalto

Tres días después del enorme fiasco de Chapín, el Deportivo repite guión en su visita a Tarragona. Otra vez lejos de A Coruña, otro rival que no se juega nada, otro asalto a Primera pendiente de un par de premisas. La primera es ganar, cosa que no hicieron los blanquiazules en Jerez. La segunda, que el Celta, que habrá acabado su partido cuando los de Oltra salten al Nou Stadi, empate o pierda. Si el Depor vence y también lo hacen los vigueses, el gran día podría se mañana, siempre y cuando el Valladolid caiga en su estadio ante el Recreativo.

En este segundo asalto al ascenso el rival, el Nàstic, está ya descendido y peleará sólo por el orgullo. Claro que al Xerez le pasaba lo mismo y... Los números del colista en casa (15 puntos y tres partidos ganados) deberían tranquilizar, pero la alergia del líder a los pequeños, asusta. Los coruñeses han perdido en Cartagena, Alcoy y Girona, los tres equipos que preceden al Nàstic en el vagón de cola. Eso, unido a que los catalanes son junto a Hércules y Valladolid los únicos que han sido capaces de rascar algo en la fortaleza de Riazor, debería poner alerta a un Depor que viene de comprobar en Jerez que la relajación se paga, y muy cara.

Líder sólido. Las apuestas dan favorito al Depor por 10 a 1 y la probabilidad indica que tiene un 96,3% de opciones de subir. Los números también dicen que los de Oltra jamás han perdido dos partidos seguidos este año, y eso es algo más que una estadística. Eso dice que el Depor no es líder por casualidad; que se ha ganado su status; que tiene crédito y argumentos para no tropezar dos veces en la misma piedra.

La única incógnita, además de ver hasta donde resiste el orgullo del Nàstic, es si Oltra rotará o no. La entrada de Manuel Pablo por Laure es obligada, pero además Borja podría refrescar la media y Morel tiene ligeras opciones de volver al lateral. Arriba la cosa parece más clara. Lassad, que está terminado la temporada como un tiro, será el encargado de buscar el KO del ascenso.