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Liga BBVA | Espanyol

Espanyol de dos caras

Siempre domina la posesión y tiene llegada. Fuera comete menos faltas pero lleva tres rojas. Agresividad, definición y defensa, claves

Espanyol de dos caras

Viene de lejos, pues el Espanyol no gana a domicilio desde enero, pero la tendencia se ha acentuado y agravado en este inicio de temporada: ¿cómo un equipo casi infalible en casa es capaz de perderlo todo fuera? ¿Es acaso un despropósito el juego que los pericos proponen lejos de Cornellà-El Prat? Lo curioso, a pesar de los resultados, es que no. Los de Mauricio Pochettino siempre dominan la posesión a sus rivales a domicilio y disponen de ocasiones de gol (diez el domingo, ante el Levante), pero claramente algo falla. Y ese algo parece ser la agresividad mal interpretada, la definición en los últimos metros y, con mayor evidencia, la defensa.

Uno de los datos más clamorosos es el de las faltas cometidas. El Espanyol lleva más en casa (42) que fuera (37), con un partido menos en Cornellà-El Prat, y sin embargo el saldo a domicilio es devastador: tres expulsiones y 12 de las 19 amarillas que ha visto el equipo (el récord por ahora de Primera). Javi López (cuatro tarjetas), Javi Márquez y Héctor Moreno (tres) figuran entre los más amonestados de Primera sin haber destacado especialmente por ejercer ningún tipo de violencia.

Todo esto implica que el equipo es en casa más agresivo, entendido como intenso, mientras que fuera cae en una candidez que le cuesta partidos; pocas faltas, pero muchísimo castigo. Una de las curiosidades en ese sentido es que sea un delantero, Thievy Bifouma, el jugador que más faltas ha cometido del conjunto (14) y prácticamente de la Liga (sólo superado por Pina, del Mallorca, quien acumula 15).

Obviamente, jugando en inferioridad o condicionado por las amarillas es más difícil ganar. Aun así, el Espanyol tiene fuera casi tantas ocasiones como el equipo local y sin embargo siempre pierde. Por tanto, al equipo le falta puntería, definir bien en los metros finales, ya que no está aquejado de profundidad ni negado de remates (12 a puerta en tres partidos a domicilio). La otra lectura es que al oponente le cuesta mucho menos acertar, pues con un número similar de ocasiones es capaz de anotar más goles (seis en contra en las tres salidas). En casa, sin embargo, el Espanyol defiende con mayor solidez y convierte a gol uno de cada cuatro remates a puerta.

Como nota positiva, la escuadra perica lleva dos salidas marcando, algo que no ocurría desde ocho meses atrás. Y, por supuesto, el próximo partido es en Cornellà-El Prat: hogar, dulce hogar.