Iniesta y La Rioja para rematar la faena

Multipliquen por 20 el número de habitantes de Liechtenstein (35.904) y se aproximarán mucho al de futbolistas federados en España. Esa delgadísima pared centroeuropea separa aritméticamente a La Roja de la Eurocopa de Polonia y Ucrania (ganar nos clasifica). Y La Rioja lo pondrá todo de su parte para echarla abajo. 17.000 personas llenaron ayer Las Gaunas y repetirán hoy para hacerle sentir calor al equipo, y también para recordarle la responsabilidad de esmerarse en un partido que invita al sesteo. Por ahí no se intuye peligro. España encadena once triunfos oficiales consecutivos.

Logroño lleva quince años sin un equipo en la élite, lo que ha disparado el síndrome de abstinencia. Y hay un efecto llamada gracias a Llorente. En tiempos fue costumbre recurrir a un futbolista de la tierra para conectar con el público. Futbolista que en raras ocasiones repetía. No es el caso. Llorente ha jugado 17 partidos con la Selección, cinco como titular y sólo uno completo. Y aún así ha metido siete goles. Aprovecha bien el tiempo y hoy lo tendrá, quizá de salida. La plaza es para él o para Torres. Negredo se queda fuera.

Habrá más cambios, todos de aire conservador. Botía y Domínguez no debutarán de salida. Esta vez será Busquets la pareja de Albiol. Guardiola le probó ahí por primera vez en enero ante el Levante. "Estuvo fantástico. Es atento, disciplinado y tiene salida de balón", dijo después. Amén. No tendrá enemigo esta noche que ponga en duda ninguna de esas virtudes. Del Bosque aplaza la renovación de su zaga hasta que el éxito sea matemático.

De salida también estará Iniesta. Seguro que no será tan necesario como el viernes, pero engrandecerá el partido. Y es muy probable que también quepa Cesc, aunque relevar a Javi Martínez le señalaría como máximo pecador del mal trago ante Chile. Ponerle en su sitio salvaría su buen nombre.

Todo para despachar a Liechtenstein, selección que ha pasado de rodar descolgada a hacerlo en la cola del pelotón, de perder siempre por mucho a perder menos y por poco. Dos victorias y tres empates en sus diez últimos partidos y a un puesto (119) de su techo en el ránking FIFA. Su crecimiento no inquieta pero avisa.

Dos llenos en dos días

Logroño solamente ha acogido un partido de España. Fue en 2002, un amistoso ante Paraguay (0-0), y ya entonces se llenó Las Gaunas. Ayer, en el aeropuerto 600 aficionados esperaban a La Roja y por la tarde las gradas del estadio estaban repletas. Llorente fue el más aclamado.