Liga BBVA | 14ª jornada
El carrusel
El Barça montó su segundo show en sólo una semana. El primero fue el lunes, en el 5-0 ante el Madrid, pero el del sábado le dejó en muy mal lugar por su desprecio hacia Osasuna y el resto de los que conforman el fútbol español. Luego ganó con holgura. Más que el Madrid, que, pese a ello, es la única sombra de los de Pep.
Lass es la clase de cinturón que gusta a Mourinho
El matrimonio entre Mourinho y Lass ha tardado en producirse, pero daba la sensación de que estaba condenado a existir. Las condiciones del mediocentro galo son las que tradicionalmente han gustado al técnico portugués. Al menos al Mourinho que conocíamos hasta ahora. En sus primeros meses no le ha hecho ascos a esos Once Fantásticos que con tanto acierto han remado, pero su obsesión es mantener siempre el ensamblaje defensivo. La abultada derrota en el Camp Nou ha hecho plantearse muchas cosas a Mourinho. Una de ellas es que quizá no le baste con Khedira y Xabi Alonso para sujetar lo que tiene por delante. Por eso Lass entró ante el Valencia por Higuaín en vez de Benzema. Puede ser un caso aislado. O no. Si es fiel a sí mismo, Mourinho sabe que no.
La loable lealtad de Xabi Prieto
El derbi vasco volvió a donde debía, a Primera División, y lo hizo con un partido en el que regresó la intensidad que siempre caracterizó a estos enfrentamientos. Ganó la Real. Y ganó con orgullo y honradez. No es fácil hacer lo que el conjunto txuri-urdin en su regreso a la élite. Competir de tú a tú con los mejores, como ha hecho con Real Madrid y Atlético, por ejemplo, e imponerse en el gran clásico regional evidencia que hay un buen trabajo por detrás. Especialmente importante es la labor en el conjunto realista de Xabi Prieto. El donostiarra ejemplifica lo que es el amor a una camiseta. Vagó como el resto por Segunda cuando el equipo de su corazón se arrastró por dicha categoría y se mantuvo fiel a su sentimiento aun cuando contó con ofertas para marcharse. Ayer abrió el marcador con un penalti que tuvo que repetir por una paradinha mal interpretada por el árbitro. Para la Real es un lujo contar con la calidad de Xabi. Y para él lo es jugar en la Real. Sí, en el fútbol existen fidelidades de este tipo. Aunque cueste encontrarlas.
Los incendios no se apagan con gasolina
Quique atraviesa una época turbulenta y no está sabiendo cómo superarla. De hecho, está tratando de apagar los fuegos con gasolina. Su último desatino ha sido cargar contra Domínguez y su entorno en público y sin tapujos. Cualquier problema que pudiera haber entre ambos debería haberse subsanado en privado. Tampoco están favoreciendo a su imagen los desaires a los árbitros e incluso a jugadores rivales, como pasó en su día con el españolista Luis García. Por eso en Valencia vio la derrota de su equipo desde la grada, lejos de los oídos de sus alicaídos futbolistas. Es tiempo de arrimar el hombro, no de crear conflictos. Y Quique empieza a tener ya muchos.
Una pareja sobre la que poder crecer
Forlín y Víctor Ruiz. Víctor Ruiz y Forlín. El Espanyol consume una temporada magnífica cimentada sobre dos bases solventes. Sus dos centrales -de 22 y 21 años- están conformando una pareja a tener muy en cuenta. El argentino Forlín llegó la campaña pasada sin hacer ruido de Boca Juniors. El año anterior había jugado en el Castilla, pero los responsables técnicos del Madrid no le vieron las aptitudes necesarias que sí divisaron poco después los del Espanyol. Víctor Ruiz, por su parte, es una apuesta firme de Pochettino desde el pasado invierno. El de Sant Feliu del Llobregat ha respondido y ya es fijo en la Sub-21. El Espanyol avanza. Y lo hace con dos patas firmes.
El recurso del portero no debe malgastarse
A todos nos sorprendió aquel día en que Palop marcó un gol decisivo de cabeza en Ucrania que permitió al Sevilla avanzar una ronda en la UEFA que después acabaría ganando. Por antinatural, a veces reclamamos con brío que el portero suba al remate en las últimas acciones. Es divertido ver cómo el portero corre torpemente, la pide a gritos, bracea, salta y, cuando puede, remata. Si marca, entonces es el éxtasis. Pero la realidad de esas acciones indica que son recursos a emplear en duelos a vida o muerte, finales o días sin margen de reacción. No fue el caso del Villarreal-Sevilla, con 24 jornadas aún por delante. Palop subió como si fuera el salvador, dejando incluso en mal lugar a sus compañeros. Si tan bien remata, ¿por qué es portero y no delantero?
El ojito derecho de Pellegrini es Recio
Pellegrini ha recurrido a un joven del filial para imprimir solidez a un centro del campo que veía huérfano desde su llegada a Málaga. Se trata de Recio, de 19 años, que ayer ante el Racing marcó su primer tanto en los tres partidos que lleva jugados desde que el chileno le diera la alternativa. No es habitual que un técnico nuevo apueste por un canterano al que apenas conoce para llevar la manija de un conjunto en apuros. Pero Pellegrini ya lo hizo con Bruno en el Villarreal y el resultado es el conocido. El chico, además, sabe perfectamente en qué mundo se ha metido. De hecho, ha adoptado su tercer apellido como nombre futbolístico en honor a su tío, también conocido como Recio, importante jugador del Málaga en Primera en la época de los 80 y cuya estela trata ya de continuar. Con la venia de Pellegrini, por supuesto.
Goles y nombre con didicatoria: A. J.
A Pedro Ríos le ha costado toda una vida llegar a Primera. Para alcanzarla tuvo que pasar por Tercera (Sanluqueño), Segunda B (Ceuta) y Segunda (Xerez) antes de que la pasada campaña le fichara el Getafe. Muy pocos pueden decir cuando están tan arriba que partieron de tan abajo. Menos, aún, que en ese recorrido pisaron todas las categorías. Un camino que el jerezano realizó siempre con el apoyo de su padre, el primero en acompañarle a farragosos viajes y entrenamientos, alma alentadora desde la grada y fiel apoyo en cada ilusionante cambio de categoría. Lamentablemente, Antonio José, que así se llamaba, murió hace dos años, justo antes de que pudiera ver a su hijo en lo más alto. Por eso, él le dedica goles como los de ayer al Mallorca. Y también estampa sus iniciales en la camiseta azulona: A. J. Ríos.
El personaje: Patxi Izco
Dicen de los navarros que son tercos como ningunos. Y hay veces que con razón. Patxi Izco, presidente del club más representativo de todos ellos, Osasuna, luchó por los intereses de su equipo y de su afición de manera encomiable. Se negó al aplazamiento del duelo ante el Barça �lan que sólo entraba en las fatuas y fantasiosas cabezas de Guardiola y alguno de sus parapetos en la FEF�para recordar que en este negocio, y en la vida en general, todos deben ser tratados por igual. Los controladores aéreos no sólo afectaron al Barça, sino también a otros muchos equipos profesionales y modestos que sí se buscaron la vida. También a 600.000 españoles varados en aeropuertos. El Barça no podía ser una excepción. Y tuvo que ser Izco quien lo recordara.
Pedro y los jugadores en racha
Pedro no perdió de milagro el AVE a Zaragoza en la odisea del Barça hacia Pamplona. Y menos mal para Pep. El canario volvió a ser decisivo con el primer gol y dejó claro que es un futbolista de rachas. Si coge una, como ahora, es casi imparable.
Portugal agota su crédito
El Racing sigue sin carburar y todas las miradas se dirigen inquisitivamente hacia su técnico, Miguel Ángel Portugal. La derrota en Málaga dejó síntomas de escasez en su fútbol. Su experimento de colocar tres mediocentros tampoco funcionó.
Caicedo aún tiene margen
En Ecuador tienen puestas aún muchas esperanzas en Felipe Caicedo, uno de los mejores productos de aquel país. Pero su falta de asentamiento en Manchester City, Sporting de Lisboa y Málaga lo puso en duda. Con el Levante vuelve a realzarse.
Lillo debutó como lateral derecho del Almería. Suena a guasa por tener el mismo apellido que el ex técnico, pero Oltra confió en él para pitorreo de los aficionados.
Albelda fue protagonista antes, durante y después del partido ante el Madrid. El árbitro le expulsó injustamente, pero él debió ser más discreto. Sabían su matrícula.