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Miguel Ángel López

"El Mundial 2018 incrementaría el PIB del país en un 3%"

Miguel Ángel López (Sigüenza, 1947) es el director de la Candidatura Ibérica que conforman España y Portugal. El jueves puede ser designada como sede del Mundial 2018.

Miguel Ángel López.
PEPE ANDRÉS

La FIFA decide el jueves la sede del Mundial 2018 y también la del 2022. A la primera opción aspira la Candidatura Ibérica, esa ilusión conjunta de España y Portugal. ¿Qué sensaciones tiene llegados a este sprint final?

Somos moderadamente optimistas, pero la victoria para cualquiera de las candidaturas que optamos a albergar el Mundial va a estar muy reñida. No va a haber goleadas. Inglaterra, Rusia y la conjunta de Bélgica y Holanda serán rivales duros y con opciones.

Pero el informe evaluador de las diferentes candidatas hecho público por FIFA hace unos días nos situó como uno de los favoritos, ¿no cree?

Sí, salimos bien parados, la verdad. Se dijo que fallamos en el número de campos de entrenamiento, pero eso les sucedió también a las demás, así que quizá fue el profesor el que se expresó mal y no los alumnos los que lo entendimos erróneamente. También se habló de la seguridad, pero fui yo el que recalqué nuestros esfuerzos en este tema cuando vino el grupo evaluador en agosto. Por último, se incidió en los inconvenientes de coorganizar un Mundial entre dos países. No creo que sin fronteras físicas y teniendo la misma moneda y regímenes políticos iguales pueda entenderse eso hoy en día como un obstáculo.

En cambio, se recalcaban positivamente los transportes y se hacía especial mención al AVE. ¿Es el tren rápido uno de nuestros puntos fuertes?

Hemos logrado muy buena calificación en ese sentido. El AVE hasta Badajoz es un hecho y sólo faltaría unirlo con Lisboa. Yo creo que sí se haría, pero el gobierno portugués tratará de que sean empresas de aquel país las que lo ejecuten. Es normal. La red de trenes de alta velocidad ya es extensa hoy en día y tiene un índice de puntualidad del 98,5%, sólo por detrás de Japón.

En cuanto a capacidad hotelera, España y Portugal están muy por encima de sus grandes rivales: más de 80.000 plazas por las escasas 13.000 de Inglaterra, por ejemplo...

Y no sólo hablamos de cantidad, sino de calidad. Además, la mayoría de esas habitaciones se engloba en unos precios que hemos calculado que serán razonables cuando llegue el Mundial. Ya sabemos que Inglaterra tiene un problema en este sentido y Rusia, pese a que también ha prometido muchas plazas, tendría que construir la mayor parte de ellas, algo que no ocurre aquí.

La FIFA también quiso expresar que no ha encontrado indicio alguno de pacto con Qatar, que aspira al Mundial de 2022, para intercambiar votos entre esa candidatura y la Ibérica. ¿Les preocupaba este tema?

Nosotros siempre hemos pensado que estamos limpios. Afortunadamente, la FIFA no ha visto pruebas de irregularidad en ese supuesto pacto ilícito, como acusaban los ingleses, por lo que mantenemos la confianza. Lo único que ha dicho Qatar es que España le ayuda con cursos de entrenadores y de árbitros, lo cual es verdad, por lo que es lógico que puedan decantarse por la candidatura que defendemos.

¿Qué cálculos han hecho de lo que pueda ocurrir en la primera ronda de votaciones? ¿Cómo está la intención de voto?

El Comité Ejecutivo, cuyos miembros tienen cada uno un voto, lo conforman 22 personas, aunque es de esperar que el presidente Blatter no apueste por ninguno. Nosotros confiamos, en principio, en que podamos sacar ocho votos en la primera vuelta. Serían los tres de Sudamérica, otros cuatro de entre Asia y África, y el nuestro, claro. No llegaríamos a la mayoría absoluta de 11, pero entendemos que tampoco lo harían las demás. Entonces se irían eliminando las que menos votos obtuvieran en cada ronda y a partir de ahí habría que ir captando a votantes cuya opción principal hubiera quedado ya fuera.

¿Cómo será la presentación de la Candidatura Ibérica previa a ese recuento de votos?

El periodista portugués Pedro Mourinho la conducirá. Primero hablaran Laurentino Dias y Jaime Lissavetzky, secretarios de Estado para el deporte de Portugal y España, después yo explicaré los entresijos técnicos de la candidatura y finalmente los presidentes federativos, Gilberto Madail y Ángel María Villar, cerrarán las alocuciones. También habrá un par de vídeos que apoyen nuestra exposición. En la media hora que tenemos se pueden explicar los pormenores de la candidatura de cualquier manera menos con actuaciones musicales.

¿Qué caras conocidas representarán en la gala de Zúrich a la Candidatura Ibérica?

Está previsto que en la delegación viajen los seleccionadores de ambos países, los presidentes de las diversas ligas, de los diferentes sindicatos, jugadores históricos como Eusebio y Butragueño, embajadores del estilo de Fernando Hierro y Luis Figo, y finalmente también podremos contar con Casillas y Cristiano como capitanes de ambas selecciones, la española y la portuguesa, que conforman la Candidatura Ibérica.

Sinceramente, de entre las alternativas que conforman Inglaterra, Rusia y Bélgica-Holanda, ¿cuál consideran que es la más peligrosa de todas?

No se sabe. Nosotros respetamos a las demás y hasta la cenicienta que parece ser Bélgica-Holanda puede ganar por sorpresa, como ya ha sucedido en ocasiones anteriores. Sin embargo, la FIFA ha concedido los dos últimos Mundiales a países que han requerido una fortísima inversión para poder albergar la cita, Sudáfrica y Brasil, ésta última con 13.300 millones de dólares de gasto, y en los tiempos de crisis que corren quizá prefiera decantarse esta vez por nuestra opción, que en estadios gastaría mucho menos, 2.000 millones de dólares, que Rusia, por ejemplo. Esperamos que a la tercera decida bajar el pistón de inversiones, porque eso nos favorecería. Somos la opción menos arriesgada de todas.

¿Afecta de alguna manera que España haya organizado un Mundial en 1982?

No. Inglaterra tuvo una Eurocopa en 1996 y los belgo-holandeses otra en 2000. Casi todos, menos Rusia, tenemos experiencias recientes en la organización de grandes eventos. Esa es una señal importante.

Ustedes han propuesto 21 estadios sede que quedarán reducidos más o menos a la mitad. ¿Cómo y cuándo se sabrá la lista definitiva?

Todas las ciudades importantes se han presentado y también hay intereses en el País Vasco o Galicia. Eso es bueno, porque la FIFA nos pide que el torneo abarque cuantas más partes del territorio mejor. Además, de esos 21 campos hay siete que apenas habría que tocar, mientras que cinco serían nuevos a construir (La Peineta de Madrid, Zaragoza, Valencia, Bilbao y Málaga). En 2012 se haría la selección final en base a la financiación que pueda aportar cada una, aunque es seguro que el Alvalade y la Luz, en Lisboa, O Dragao, en Oporto, el Bernabéu y el Camp Nou estarían entre ellos. En éste último se jugaría la inauguración y en el campo del Madrid, la final. Los estadios portugueses no han podido optar a estos partidos porque la FIFA exige un aforo mínimo de 80.000 espectadores.

¿Qué efecto económico y social acarrearía la organización de un Mundial en España?

Aumentarían los empleos en la construcción de los nuevos estadios y también en cuanto a voluntarios se refiere, pues habría unos 24.000. Pensamos que el PIB del país se podría ver incrementado en un 3%. Los ingresos por venta de entradas y por esponsorización local los hemos analizado desde un punto de vista conservador y habría que negociarlos antes con la FIFA, pero aún así nos sale un presupuesto muy jugoso que luego habría que repartir con la Federación Portuguesa. Nosotros obtendríamos el 70% de los mismos y ellos, por tener menos sedes y presencia, el 30%. Calculamos que esos ingresos podrían rondar los 640 millones de dólares.

Pero, además de fútbol, da la sensación de que nuestro país ofrece, junto a Portugal, todo lo que se le pide a un Mundial: sol, ambiente, gastronomía...

Sin duda. En estos dos países existe una gran cultura de fútbol y la sociedad gira casi en torno a él. Casi cuatro millones de personas lo practican y muchos de sus ciudadanos van o han ido al estadio alguna vez en su vida. Pero, además, cada estadio tendría un partido clave -incluyendo semifinales y final- y estaría asegurada la diversión, la buena comida, el tiempo agradable y la cultura de dos países hermanos.

Por si fuera poco, esta jornada los equipos de la Liga apoyarán públicamente a la Candidatura Ibérica. Curiosamente, coincide con el mejor Barça-Madrid de los últimos años. ¿Hay mejor publicidad posible?

Hemos tenido suerte porque la jornada inmediatamente anterior a la gala del jueves contiene ese Barça-Madrid que llegará a todo el mundo. Va a ser una gran forma de anunciarnos. También, a menor escala, el Sporting-Oporto que se jugó ayer en Portugal. En general, la unidad de criterio entre los dos países ha sido fantástica en todo momento. Los portugueses ya organizaron de maravilla la Eurocopa de 2004 y parte de ese legado aún se usa de ejemplo en la Unión Europea, sobre todo en temas de seguridad. Hemos trabajado de la mano de manera eficaz y concisa. A ver si hay suerte.