Liga BBVA | Jornada 12
Multifútbol
Exhibición de pegada de Madrid y Barcelona a las puertas del Clásico. Los de Guardiola, que cada día van a más, se dieron un paseo triunfal en Almería que le costó el puesto a Lillo. Poco después, el Madrid mantuvo el pulso ante el Athletic con el comodín de Casillas, que antes del ciclón volvió a ser vital. Menudo Barça-Madrid viene.
Dioni: del Caravaca a verse en Primera
Lotina alineó a Dioni como titular ante las muchas ausencias en el ataque de su equipo. El delantero, de 20 años, ya había tenido minutos esta campaña ante Villarreal, Almería y Osasuna, pero encontró la titularidad por vez primera frente al Málaga, equipo de su ciudad natal, la misma que dejó siendo juvenil para irse al Murcia. Allí se formó como futbolista y el año pasado, goleando en el modesto Caravaca, en Segunda B, llamó la atención del Depor, que lo contrató para su filial. Sólo cinco meses después ya ha sido titular en Primera, lo que demuestra que la frontera que separa el fútbol modesto del de élite a veces no es tan grande. Aunque parezca lo contrario.
Agüero, el rey de los partidos calientes
Agüero se multiplica en partidos intensos, de revoluciones, como el que vivimos en Anoeta y que recuerdan a esos clásicos de Argentina, los mismos que él jugó con Independiente con apenas 16 años y ante los gritos de los enfervorizados hinchas rivales. El Kun hizo dos tantos y dio el primero a Forlán dentro en un segundo tiempo en el que, esta vez sí, el Atlético supo rubricar con goles y con remontada lo que no pudo hacer en visitas atrás a Villarreal y Madrid. Da gusto ver el compromiso de una gran estrella como él con su escudo. Otros se achican ante el ambiente hostil que propicia un mal arbitraje para los locales. Él, en cambio, se supo aprovechar de ello.
De 'Fair-Play' y el engaño generado
No hay gesto más loable que el de un jugador que tira el balón fuera cuando un rival está realmente dolido sobre el césped. David Silva, de hecho, se ganó el juego al Fair Play de la LFP hace unos años -cuando aún era jugador del Eibar- por hacerlo estando solo ante el portero. Sin embargo, esta buena voluntad se ha convertido en los últimos años en una trampa que emplean con mala fe los futbolistas según sus intereses. Tal es la desconfianza generada que ni árbitros ni jugadores saben si hay engaño o lesión. Por eso es obligado que sea el colegiado, únicamente él, quien determine el grado de gravedad. Esta vez fue el Racing el que se desquició porque el segundo gol del Levante llegó con Iván Bolado doliéndose tras un golpe en el rostro que le hizo sangrar. Pero la semana pasada habían sido los propios levantinistas los damnificados. Y anteriormente otros. Y así todos los equipos. Sin fin. ¿Teatro o lesión? Basta ya. Urge unificar el criterio y dar plena potestad al árbitro.
Casillas no hace de extra ni en las goleadas
Iker Casillas es el único portero del mundo capaz de ser el mejor, o uno de los mejores, de su equipo cuando golea un partido por 5-1. Con ese marcador lo normal suele ser situar el peculiar punto de mira en hambrientos delanteros, talentosos mediapuntas o decididos mediocentros. Pero Iker tiene ese don que le hace insustituible para el Madrid. Es como una red protectora para los malabaristas circenses que vuelan por delante de sus ojos, fugaces de lado a lado, arriesgados y mágicos en sus acciones. Todos ellos saben que por detrás cuentan con el mejor sustento posible. Un apoyo sólido y fiable como Casillas, la pieza maciza de mármol que sujeta a este Madrid de Mou y que ante el Athletic se sumó al festival con tres paradas decisivas en el triunfo.
El pintor cumple su sueño a los 32 años
Había una vez un pintor que ejercía en obras y reformas del País Vasco. Su nombre era anónimo: Unai Alba. La otra gran pasión de Unai era ser portero, tirarse en campos embarrados los fines de semana y parar todos los balones que pudiera. Así fue compaginando sus dos aficiones, hasta que sus buenas actuaciones con el Barakaldo le hicieron firmar por el Hércules, con el que ayer debutó en Primera a los 32 años. Fue un estreno con derrota. Pero no importa. El pintor de Oiarzun jamás lo hubiera imaginado.
El mejor mediocentro de la liga por datos
El Villarreal conquistó un empate ante el Valencia gracias, entre otras cosas, a la constancia de Bruno en el segundo tiempo. El canterano lleva tiempo consolidado como el motor del equipo amarillo y el gran reconocimiento lo obtuvo esta temporada con su convocatoria para la Selección. No fue casualidad, ni mucho menos. El de Artana es uno de los mejores pivotes de la Liga, si no el mejor. Lo indican los datos, esos fríos números que corroboran que se trata del que más balones recupera (136) -por delante de otros mediocentros de su perfil como Xabi Alonso (121), Javi Martínez (110), Khedira (66) o Busquets (53)- y del tercero que más pases correctos da (78% por 83 de Busquets, 80 de Xabi, 76 de Khedira y 59 de Javi Martínez). La mezcla de ambas cosas le hace ser uno de los secretos de este gran Villarreal.
Pereira ya tiene para pagar el alquiler
El Mallorca de Laudrup empieza a dar síntomas de gran cohesión. Uno de los artífices de que eso sea posible es el punta Michael Pereira, francés de 23 años que ayer marcó el primer gol de su equipo y que ha pasado por penurias de todo tipo en la Isla hasta llegar a su actual situación. Y es que, tras ser fichado del modesto Alfortville el pasado año para jugar en el filial, su escaso salario le hizo atravesar por problemas económicos que incluso le forzaron a pedir un crédito para poder pagar el alquiler de su piso. Verse con 30 euros en la cuenta no es lo habitual en un futbolista. A él le pasó este verano. Afortunadamente, el problema se resuelve con goles como el de ayer.
El personaje: Lillo
Juanma Lillo genera tanta animadversión entre la gente que rodea al fútbol como reconocimiento por parte de la que lo compone. A la afición, y por lo visto tampoco a los dirigentes, no le gustan sus teorías ni su mareante labia ni su pelo rizado en busca de un mayor aire juvenil y desenfadado. Todo lo suyo molesta. Dentro del gremio, sin embargo, es una persona inmensamente querida, capaz de traer a los clubes que dirige a las mejores promesas sudamericanas, amigo íntimo de Bielsa o Guardiola y puntilloso conocedor de los tejemanejes que conforman este deporte. Por eso quizá supiera que su cabeza estaba cortada desde hace tiempo. Lo que no imaginaba es que fuera su amigo Guardiola quien la acabara de cercenar, además con un 0-8 que servirá para agitar a más de un lenguaraz crítico. Lillo siempre será un romántico, un ideólogo de equipos grandes, pero nunca alguien como para pelear por la salvación. Cruel paradoja la suya.