Clamor general contra el permisivo Piñeiro Crespo

El semblante que trasladaban los jugadores de la Unión Deportiva tras el partido del viernes frente al Elche era de indignación absoluta contra Piñeiro Crespo, el árbitro del partido. Uno tras otro ante los periodistas, como si fuera una letanía de Semana Santa, se quejaban amargamente de la actuación del colegiado y sus auxiliares, que permitieron codos y malos modos de los jugadores ilicitanos durante los noventa minutos. Ripa, Acciari y sobre todo Wakaso eran el centro de las iras y comentarios de los futbolistas de Las Palmas, que solicitaron una y mil veces al colegiado asturiano que actuara con más rigor.

Amoratado por la agresión de Wakaso en el minuto 28 de encuentro, Álvaro Cejudo fue el más tajante: "Ha sido imposible mantener el ritmo con este árbitro, a David González no le ha pitado ni una falta". El habilidoso mediocentro, al igual que Javi Guerrero, fue objetivo del juego subterráneo de los locales que, en ocasiones, confundieron virilidad con zancadillas a destiempo, ante la tibieza del árbitro a la hora de sancionar. "Nosotros no nos vamos a quejar de los árbitros, eso que lo hagan otros", dijo Álvaro Cejudo, en referencia a otros estamentos del club, ya se el entrenador o el presidente de la entidad.

Sin embargo, Paco Jémez se debió morder la lengua durante la comparencia de prensa y espetó que Piñeiro Crespo "no le había gusta ni en el calentamiento". Un mensaje claro, aunque el técnico ha optado por no meter más carne en el asador, teniendo en cuenta su historial con los trencillas.

Más expresivo y directo se mostró Samuel Sanjosé al recalcar que "el árbitro no nos ha ayudado y ha favorecido el equipo local casi siempre". Mientras, el capitan del grupo, David García, tampoco que se quedaba mudo en su valoración, ni Ruymán, ni tampoco Pindado, todos coincidían en señalar a Piñeiro Crespo, como uno de los culpables del empate final en el Martínez Valero.

El asturiano ya ha montado otros 'shows'

Las actuaciones de José Ramón Piñeiro Crespo no suelen pasar desapercibidas en Segunda División. Esta misma temporada los jugadores del Tenerife ya clamaron contra el colegiado al señalarles un dudoso penalti en el Nuevo Arcángel frente al Córdoba. En la temporada pasada, todos los jugadores del Cartagena se quejaron del arbitraje de Piñeiro, a quien responsabilizaron de la derrota sufrida en Tarragona (3-2). "En 20 años de carrera no había sufrido una arbitraje tan lamentable", confesó el veterano delantero Víctor. Sin embargo, uno de sus mayores 'shows' lo montó en Castalia en diciembre de 2006 en un Castellón-Xerez, donde expulsó a cinco futbolistas. Para Pepe Moré, técnico del Castellón, el encuentro "fue un partido muy limpio, aunque suene a risa".