"Fue un palo grande, pero resurgiremos en Cádiz"

¿Cómo se encuentra después de la derrota sufrida frente al Villarreal B?

Me duele haber perdido ese partido, sobre todo porque la gente estuvo apoyando muchísimo y hubo un ambiente de fútbol impresionante. Todos los miembros de la plantilla queríamos ganar para dedicárselo a todos ellos. Se lo merecen.

¿Piensa que la responsabilidad de tener un estadio lleno les pasó factura de alguna manera?

Creo que no. Nosotros siempre salimos a jugar como si fuese una final. Contra el Villarreal B salimos igual que lo hicimos contra el Hércules, el Cartagena y como contra el Betis, con mucha intensidad e ilusión por ganar.

¿Cuáles fueron las claves del partido?

El Villarreal nos dio dos duros golpes, uno nada más empezar el partido y otro al final de la primera parte. En el descanso ya íbamos 0-2 y eso te hace ir a remolque durante todo el encuentro.

A pesar de ello y de que jugó con uno menos tras su expulsión, el equipo logró empatar...

El partido se nos puso en contra desde el inicio, pero el equipo hizo un esfuerzo buenísimo. La actitud de mis compañeros es para elogiar. Pero tuvimos mala suerte, ya que después de tanto esfuerzo y de sobreponerse a todas las adversidades para lograr empatar, el rival marcó el tercero en la siguiente jugada.

¿Piensa que tras esta derrota el equipo ha perdido muchas opciones de conseguir el ascenso a Primera División?

Nosotros sabemos que fue un palo grande el no poder ganar, pero sabemos que esto continúa y que en Cádiz tenemos otra gran oportunidad para resurgir. Yo no tengo dudas de que este plantel hará un gran esfuerzo para sacar el partido del próximo domingo y poder seguir con opciones de conseguir el ascenso. El viernes nos sentimos muy arropados y queremos que se repita.

¿Qué pasó en las dos jugadas que provocaron su expulsión?

En la primera jugada hubo un malentendido porque yo me acerqué a la banda para decirle a Crespí que sacara rápido mientras discutían en el banquillo rival. Pero el árbitro entendió que le dije algo a los que estaban discutiendo y me amonestó. En la segunda vi que podía llegar a la pelota, pero el jugador rival metió la punta y tocó el balón. Esta es mi manera de jugar, siempre voy al límite. Pero es cierto que me expulsaron en un momento clave, y me dolió con toda el alma por mis compañeros, que tuvieron que hacer un gran esfuerzo.

¿Le gustaría que se volviera a repetir el ambiente en el Martínez Valero dentro de 15 días?

Eso depende de nosotros mismos. Si el próximo domingo logramos ganar y recuperar lo que perdimos contra el Villarreal seguirá la unión entre la plantilla y la afición.