"El árbitro me dijo que no me iba a pitar ni una"

Es una evidencia que Diego Costa no tiene buen cartel entre el colectivo arbitral. Es cierto que el delantero brasileño se deja caer a veces, pero no lo es menos que recibe constantes faltas en cada partido e incluso le han hecho más de un penalti claro que no ha sido señalado. El martes, ante el Sevilla, fue otro ejemplo claro de lo que está sufriendo a lo largo de la temporada: los jugadores hispalenses le frenaron, casi siempre, en acciones punibles y se reclamó un posible penalti que le hizo Dragutinovic en la primera parte. Álvarez Izquierdo no lo señaló como tampoco la mayoría de las veces que cayó al suelo; de hecho, en algunas ocasiones en las que acabó rodando por el césped, el colegiado entendió que había sido el propio Costa el infractor de la falta. El brasileño desveló ayer lo que le espetó Álvarez Izquierdo al acabar la primera mitad: "Fui a hablar con él y me dijo: 'a tí no te pito ni una'. Yo me lo tuve que tragar, pero en la segunda parte lo cumplió y no me pitó ni una a favor. Creo que no le caí muy bien, pero me centré en disfrutar de cómo lo estaba haciendo el equipo en lugar de entrar en guerra con el árbitro". En cuanto a ese posible penalti cometido por Dragutinovic, Costa no lo tenía muy claro: "No sé si fue. El jugador rival llegó fuerte y a lo mejor si hubiera sido a otro equipo sí lo hubiese pitado".

Amén de la relación controvertida de los árbitros con Diego Costa, el brasileño volvió a ser el jugador explosivo que durante las últimas jornadas había desaparecido. Marcó, ocho partidos después, encarriló la victoria y acabó satisfecho con su actuación, la del equipo y de la respuesta de la afición: "Salí contento de cómo lo hice y, sobre todo, el equipo estuvo muy bien. A ver si seguimos así de fuertes. Sabemos que nos jugamos la vida y si queremos seguir teniendo opciones de salvarnos, debemos jugar como ante el Sevilla. Si ganamos en Málaga, tendremos muchas posibilidades. La afición nos apoyó desde el principio y se mereció disfrutar de un triunfo y un partido así".

Dedicado. Costa dedicó su octavo gol en Liga a Marcos, el capitán, y explicó por qué: "Hacía tiempo que me había pedido que le dedicara un gol, pero, después de pedírmelo, estuve tiempo sin marcar. Se lo dediqué para que se me quite la mala racha, pero que no pida más y así pueda seguir marcando".