El Nàstic reconoce oficialmente una deuda de 3 millones de euros

El Gimnàstic de Tarragona ha reconocido públicamente que la deuda real de la entidad asciende a unos tres millones de euros "aproximadamente", que Antonio Pinilla, hasta hace poco director general de la entidad, tiene un contrato blindado y que este compromiso es "preocupante" para la economía de la entidad.

Así lo han asegurado hoy Josep María Andreu y José Luis García, ambos ex presidentes de la entidad y actualmente miembros del consejo de administración de la SAD y dos de los principales accionistas de la entidad.

En una entrevista concedida al programa ''Planeta Grana'' del Canal Català Tarragona, Andreu ha reconocido que la deuda económica generada por el anterior consejo de Admistración, presidido por Xavier Salvadó, esté "posiblemente en torno a los tres millones de euros".

No descarta, sin embargo, que la deuda sea todavía mayor. "Cuando cerremos el ejercicio en junio se verá, pero pienso que lo vamos a pasar mal en los próximos meses", ha aventurado Andreu.

Estas declaraciones contradicen las afirmaciones realizadas hace unas semanas por Salvadó, quien defendió públicamente su gestión, negando cualquier tipo de deuda, y achacó los rumores sobre la posible deuda a una "campaña para desprestigiar al consejo de administración".

Andreu también ha informado de que Antoni Pinilla, hasta hace poco director general de la entidad y responsable de la anterior gestión, tiene un "contrato blindado" que le impide abandonar la disciplina tarraconense.

"A Pinilla se le hizo un contrato por tres años, y le queda uno y medio. Hay que respetar ese contrato. Estamos hablando con él, porque su contrato está blindado", ha asegurado.

Más tajante ha sido José Luis García, quien ha comentado que en la situación actual el contrato de Pinilla "es preocupante" para la economía del club. "No queremos que el Nàstic entre en una situación de morosidad", ha dicho García, quien ha afirmado que Pinilla "entiende" la situación y espera "llegar aun entendimiento".

Andreu y García se han referido al futuro de la entidad, que debe estar marcado por una política de austeridad. Por ejemplo, aseguran que el presupuesto "no podrá ser como el de este año".

De hecho éste ha sido cifrado entre seis y siete millones de euros. "Si se administran bien podemos llegar a ser un club solvente", ha comentado Andreu.

Por último, José Luis García ha querido aclarar que los cambios en el Consejo comportaban la salida de Xavier Salvadó de la presidencia, ya que un nuevo consejo supone la existencia de cambios. "Hay que saber qué es mejor en cada momento. Si no hay cambio no vale la pena cambiar el consejo y es difícil cambiar teniendo un presidente que ha generado esa gestión", ha dicho García.