Internacional | Italia
La cabeza de la tabla se aprieta en una Liga italiana
El Nápoles se consolidó en el cuarto puesto de la Serie A tras vencer (1-0) a la Sampdoria en San Paolo, gracias a un gol del Germán Denis.
Los puestos de cabeza de la clasificación de la Liga italiana se apretaron hoy un poco más con la decimonovena jornada de la Primera División, en la que, a excepción del liderazgo incuestionable del Inter de Milán, los trece primeros puestos distan entre sí un máximo de dos puntos.
Los hombres del portugués José Mourinho consiguen una jornada más mantener el liderato de la Liga, gracias a una victoria "in extremis" ayer ante el Siena por 4-3, que le deja con 45 puntos, a 11 del segundo, el Milán, a falta de que éste dispute su decisivo encuentro con el tercero, el Juventus.
Por detrás, los puestos europeos se ponen cada vez más complicados con una clara igualdad entre los equipos, que dan aún más emoción a una clasificación en la que se produce un continuo baile de puestos y que puede llevar a que, en caso de derrota de los turineses, el Nápoles termine la jornada con sus mismos 33 puntos.
Mirando un poco más abajo, las cosas no están mucho más claras: el Roma tiene 32 puntos, Fiorentina y Palermo empatan a 30, el Parma les sigue con 28 y Cagliari, Bari y Génova empatan a 27.
Uno de esos equipos que ocupan plaza europea, el Nápoles, consiguió hoy una valiosa victoria por 1-0 ante el Sampdoria del ex madridista Antonio Cassano, lo que le hizo escalar puestos y postularse como candidato a hacer peligrar la tercera plaza al Juventus.
El equipo napolitano tuvo que pasar la mayor parte del partido sin una de sus estrellas, el argentino Ezequiel Lavezzi, quien sufrió un problema muscular en la primera media hora de juego y tuvo que abandonar el campo entre evidentes muestras de rabia. Esa ausencia fue remediada gracias al tanto del argentino Germán Denis.
Pero el ejemplo más palpable de la igualdad en la clasificación italiana fue el reñido partido que disputaron hoy Fiorentina y Bari, que empezaban la jornada empatados a puntos y que concluyó finalmente con un 2-1, a favor de los locales.
Los toscanos, uno de los tres equipos italianos que siguen vivos en la Liga de Campeones, consiguieron remediar con un tanto en los últimos minutos de la primera parte del rumano Adrian Mutu la ventaja que el brasileño Vitor Barreto había dado al Bari.
Dos remates de cabeza fueron los que sirvieron a ambos equipos para llegar al descanso con la igualada en el marcador, en uno de los partidos más interesantes de la jornada que terminó llevándose el Fiorentina gracias al tanto del argentino José Ignacio Castillo.
El Livorno y el Parma, en el que juega el ex madridista Cristian Panucci, concluyeron su encuentro con una victoria de los primeros por 2-1 y con los parmesanos cada vez más abajo en una clasificación en la que llegaron a ocupar el cuarto puesto a finales del año pasado.
En sustitución del argentino Rodrigo Palacio, el español Alberto Zapater salió en los últimos minutos de la primera parte para ayudar a obtener un óptimo resultado para el Génova (2-0) en el encuentro ante el Catania, que vio cómo ya desde los primeros treinta minutos tenía que jugar con diez jugadores.
La ventaja para los genoveses llegó gracias a un gol del italiano Giandomenico Mesto en el minuto 36 y a otro de su compatriota Giuseppe Sculli en el 71 del partido, en el que estuvo muy presente su compañero de equipo, el hondureño David Suazo.
En el resto de encuentros de la jornada, el Palermo venció al Atalanta por 1-0.
Bolonia y Cagliari concluyeron su partido con un 0-1 para los sardos, mientras que el Lazio empató a 1 con el Udinese, en medio de la polémica por el malestar entre el entrenador Davide Ballardini y el argentino Mauro Zárate por unas declaraciones del técnico en las que criticaba al jugador.
En uno de los dos partidos adelantados de la jornada, el Roma, que ahora se sitúa en el quinto puesto de la tabla, venció por 1-0 al Chievo en un encuentro en el que pudo debutar el italiano Luca Toni tras su salida del Bayern de Múnich.