Víctor Fernández
"Volvería a entrenar al Celta en Segunda"
Pocos profesionales conocen como Víctor los entresijos de un Betis-Celta. El técnico aragonés elogia a Eusebio, con quien se identifica en su gusto por el fútbol de toque.
Aún se recuerda un Betis-Celta que ofreció Canal Plus. Fue en 2002. Ganó 2-1 el Betis que usted dirigía, con Joaquín y Denilson. Pero fue mejor el Celta, de Mostovoi, Luccin y Gustavo López. El domingo juegan Betis y Celta, también por el Plus, pero en Segunda...
Lo veo con añoranza, eso para empezar. Llevo en el corazón a Betis y Celta y por su historia y prestigio, contemplo con mucha extrañeza que ambos se vean las caras ahora en Segunda División.
¿Cómo los ve desde la distancia? Cuando usted los dirigió estaban mucho más arriba...
Desgraciadamente, en una situación complicada. El Celta está logrando reconducir su situación. Lo he visto en algún partido, y juega muy bien al fútbol. Creo que en una o dos temporadas va a ver el futuro de una manera mucho más halagüeña. El descenso del Betis me sorprendió, tenía un gran equipo. Lopera hizo un gran esfuerzo económico para reforzar la plantilla y, sin embargo, se fue inexplicablemente a Segunda. Percibo una gran crispación social pero no creo que el Betis esté en riesgo, siempre ha estado protegido por la estabilidad que le ha dado Lopera.
Pero usted ha visto a 60.000 personas manifestar se en la calle después del descenso del Betis, una contestación absoluta a todo lo que representa Lopera. ¿No lo ve así?
Es difícil opinar desde la distancia. Desde luego, es una situación de histeria. Y la buena marcha de una Sociedad Anónima Deportiva pasa por la armonía de los dirigentes, el equipo y la afición.
Repasemos someramente una lista de entrenadores desde que se marchó usted de Sevilla: Serra Ferrer, Irureta, Luis Fernández, Cúper, Paco Chaparro. Nogués. Ahora Tapia. ¿Tan difícil es Lopera?
Mi relación con él fue buena a nivel profesional. Jamás se metió en mi campo de acción. Si no recuerdo mal, en los dos años que estuve quedamos entre los diez primeros y eso que para nosotros fue difícil por la lesión de Alfonso. Se intentó hacer un gran esfuerzo para fichar a Edu y Oliveira. En mi último año no pudieron venir, pero sí al siguiente. Lopera es leal con las personas que no le fallan.
¿Volvería a entrenar al Celta aunque estuviese en Segunda División?
Por supuesto, al Celta lo entrenaría en Segunda División porque todo depende de que lo lleves en el corazón y yo al Celta lo llevo. Lo mismo que al Betis. Son dos clubes que me permitieron proyectarme y ser feliz.
¿Le gusta este Celta? Su nueva idea de fútbol recuerda a la suya.
La verdad es que sí. Me gusta mucho la propuesta de Eusebio, que es buen entrenador y mejor persona todavía. Lo digo porque lo conozco y es alguien que merece la pena. Me encanta el respeto que tiene por la pelota, le he visto en directo esta temporada. Estoy convencido de que va a ir a más.
¿Y el Betis? Aparentemente, le falta personalidad.
Es un equipo de Primera que juega en Segunda. Todo eso requiere un período de tiempo para recuperar la motivación y la concentración. Pero le veo un equipo con oficio y con el trabajo de un buen profesional, como es Antonio Tapia. Al Betis le falta hacerse a la personalidad de Segunda, pero la irá cogiendo poco a poco.
El próximo rival del Celta está plagado de nombres ilustres. Ahí está Arzu. Usted lo bautizó como el nuevo Helguera porque le necesitaba para un partido contra el Barça como central. Ahora juega ahí siempre. ¿Le gusta?
Lo considero un jugador de todo espacio y todo tiempo. Juega bien, sabe llegar al área y tiene mucha calidad. Con el paso de los años sí lo vería en el puesto de central pero hoy en día me gustaría más verlo como centrocampista. Me encantó su rendimiento con Assunçao aunque, sinceramente, podría haber dado aún más.
¿Y Sergio García?
Ese chico tiene magia en fútbol. En Zaragoza me costó enfrentarme con mucha gente por él porque aposté por Sergio antes que por Ewerthon. Creo que al final el club le sacó un buen precio y además fue a la Eurocopa que ganó España.
¿Es un chico complicado? Se quiso ir y la gente le pide que sea el líder del ascenso.
Sergio García no debería soportar el peso de un liderazgo, es otro tipo de jugador. La verdad que el segundo año en Zaragoza se hicieron demasiadas barbaridades y él salió perjudicado. No sé cómo estará Sergio García de ánimo pero desde luego es un gran jugador.
Por cierto, usted dirigió a Fernando Cáceres. En Vigo se preguntan cómo vive usted su drama. Cáceres se deshizo en elogios a usted en un reciente reportaje en Fiebre Maldini.
La palabra es angustia. Y desazón, desasosiego. Está en manos de Dios pero yo espero que este partido lo termine ganando por goleada. Que salve su vida.
La última pregunta. Cuando cena con amigos, ¿qué les cuenta de lo que le quedó a nivel personal de su paso por Sevilla y Vigo?
A Sevilla he vuelto por razones profesionales y te asaltan los recuerdos, el buen trato que recibí allí. El caso de Vigo es diferente. Allí voy mucho más, porque mi mujer está muy identificada con la ciudad, tenemos una casa en Sanxenxo y vamos mucho, nos encanta. Lo que siento es agradecimiento en los dos casos.