El Arsenal jugará sin Cesc, pero tiene el 0-2 de la ida

Dos goles de desventaja parecen demasiada montaña a remontar para el Celtic escocés, que acude al Emirates Stadium con la única esperanza de hacer sonar la flauta. Wenger confía en el 0-2 de la ida y por eso le preocupa menos la ausencia de su capitán Cesc, que se retiró lesionado en el último partido de Liga. Quedó confirmado que no jugará hoy Fàbregas, pero también que el medio catalán no se rompió ningún músculo y, por tanto, es más que probable que pueda jugar el sábado ante el United y luego forme parte de la convocatoria premundialista de España.

Bien por Del Bosque, bien por estos gunners tan jóvenes como siempre y, si se mantiene la tendencia victoriosa de esta campaña (tres triunfos de tres), menos bizcochones que otros años, cuando fallos propios de la inmadurez les hacían pifiarla a menudo. Los Diaby, Sagna, Clichy, Denilson, Van Persie y compañía se han hecho más hombres y futbolistas, lo que concede pocas opciones a su rival escocés. Londres sufriría un cataclismo futbolístico si pasa el Celtic, mucho músculo y poco talento.