China llega mañana a Palma si todo sale bien

El centrocampista portugués, Bruno China, causante involuntario del enfrentamiento entre la propiedad y el cuerpo técnico mallorquinista, juega hoy en la liga portuguesa con el Leixoes ante el Marítimo de Funchal.

Esa es la condición a la que llegó el consejero delegado del Mallorca, Javier Martí, con el club luso a la hora de cerrar el acuerdo de traspaso del jugador. Y eso precisamente fue lo que colmó la paciencia de Gregorio Manzano quien, de hecho, ya no contaba con un jugador de esas características por tener esa plaza cubierta en la plantilla. El fichaje está supeditado a que el futbolista juegue hoy y, por lo tanto, si todo sigue su curso normal Bruno China viajará mañana a Palma para pasar la revisión médica y formalizar su contrato para las tres próximas temporadas.

Riesgo.

No obstante, existe el riesgo de que el jugador pudiera sufrir una lesión jugando hoy su último partido con el Leixoes y, en este caso, el Mallorca se ha cubierto las espaldas. Si eso sucediera, Javier Martí asegura que "existe una cláusula que especifica que si Bruno se lesiona, tenemos la opción de romper la operación para que finalmente no venga".

Sobre el enfado que causó en el entrenador Manzano este tipo de acuerdo, Martí aclaró que "desgraciadamente hemos tenido que llegar a ese acuerdo, sé que eso le fastidia, pero créanme que a mí me fastidia todavía más, a mí lo que me gustaría es que ya estuviese presentado".

Costará más de 350.000 euros

La operación, que oscila entre los 350.000 y 400.000 euros, está pendiente de un partido de la liga portuguesa entre Leixoes y el Marítimo de Funchal y de que el jugador se despida del club de toda su carrera para poner rumbo a la liga española. Luego habrá que ver cómo se lo toma Gregorio Manzano, quien dijo el viernes que si Bruno China no estaba con el equipo para el amistoso de hoy contra el Levante, no contaría con el jugador. Así que el caso Bruno seguirá su curso en los próximos días.