Ensayo general para la Liga en el Carranza

El Sevilla tiene lo que quería el Valencia, la Champions. El Valencia tiene lo que no quiere el Sevilla, inestabilidad institucional. Y ninguno de los dos tienen al delantero preferido: Negredo. Puestos así, sería lógico pensar que el Sevilla empieza el Carranza y la temporada con cierta ventaja, pero tampoco es eso. Parecía tan evidente que Villa (y probablemente Silva) se marcharía y dejaría huérfano al club que el Valencia ha empezado la pretemporada con la sensación de haber hecho dos fichajes de tronío. Así resultará más fácil. Al Sevilla le ha pasado algo similar con Luis Fabiano, seducido por el Milán, que jugó con él y luego se decidió por Huntelaar. Seguramente, Galliani ha pensado que le fue mejor con Van Basten que con Ronaldinho (y no reparó en Kaká). Es su elección.

Este Sevilla-Valencia que decide el segundo finalista del Carranza tiene también mucho de ensayo general. La Liga empezará para los dos en Mestalla, lo que hace difícil prever si Jiménez y Emery se lo tomarán en serio o jugarán al despiste. Tampoco andan sobrados de tiempo para evitar probar cosas importantes. A Unai se le da bien el Sevilla, al menos si piensa en una noche memorable de su Almería en el Pizjuán, cuando estuvo a punto de darle la estocada a Jiménez. Aquella goleada cayó peso sobre el entrenador del Sevilla, que sin embargo ha caminado triunfador sobre el alambre cada vez que ha vivido una situación delicada. Es su éxito.

Sevilla y Valencia tienen bocetos de once inicial, aunque faltan pinceladas. Emery todavía tiene que decidirse por un portero (Moyá-César) y por un lateral derecho (Bruno-Miguel). Jiménez persigue desesperadamente un cerebro y un punta y anuncia que jugará con dos delanteros (Kanouté-Luis Fabiano) el 80 por ciento de los partidos. Para eso necesita que el físico del delantero malí le responda. Lleva un mes entre algodones y es probable que aparezca ya en escena en Cádiz. Y en proceso de aprendizaje están Zokora y Sergio Sánchez, lateral que va a tener un buen test si es que finalmente juegan Mata y Silva.

Selecciones.

A todo esto, los dos equipos tienen coartada porque ha habido desbandada de internacionales esta semana. Pero en el Sevilla parecen dispuestos a cargarse de presión. Del Nido marca estilo. Kanouté ha asegurado que el Sevilla está "obligado a ganar hasta los amistosos". Y Duscher, que hay que empezar a cosechar victorias. El Valencia, mientras, promociona la ampliación de capital desde su página web pero desde las extrañas noticias sobre Dalport a comienzos del verano vive con relativa calma. Cádiz está orgullosa de recibir a dos de los outsiders de la Liga, que sin embargo están más lejos que otros años de los grandes. No hace mucho el Valencia fue bicampeón con Benítez y en Nervión soñaron con la Liga hasta la última jornada hace tres temporadas. Ahora se hace más difícil pensar que alcancen ese escalón, pero en ello están. Jiménez ha pedido refuerzos previendo exigencia, hace bien. Ya le aprietan por los resultados. Para el Valencia hay cosas que incluso van más deprisa todavía. El 27 de agosto juega la previa de la recién estrenada European League ante el Stabaek. Tiene que correr.