'Pape' Diop
"Estoy feliz; pensé que me había roto el tobillo"
Se retiró lesionado en el Tartiere el pasado miércoles. Sus gritos hicieron saltar las alarmas pero, al final, sólo tiene un esguince de grado II. Tres semanas de baja. Por eso 'Pape' ha pasado de la angustia a la alegría y analizó desde el Faro de Cabo Mayor sus primeros días en Santander.
En Oviedo se retiró lesionado y todos nos temimos lo peor. ¿Cómo se encuentra?
He tenido días mejores... ¡No sólo vosotros os asustasteis! El que más temí fui yo. Creía que me había roto el tobillo. Ahora me han dicho que sólo serán tres semanas y, tras el susto, estoy muy feliz.
¿Cómo vivió la jugada?
Estaba peleando un balón y me quedé clavado en el césped. Noté un chasquido y no podía ni plantar el pie. Es una pena que me haya pasado...
No se preocupe. Aún estamos en agosto...
Ya, pero esta época es muy importante para ponernos fuertes y hacernos con un hueco. Lo mejor es que no hay partidos oficiales y no me voy a perder ninguno. Me voy a recuperar lo antes posible.
Le veo echo un toro. ¿Qué tal sus primeros días aquí?
Muy bien, el ambiente es muy bueno en el equipo. Me han acogido de maravilla.
¿Y qué tal con Mandiá?
Es el míster que ha apostado por mí y me ha traído a Santander. ¿Qué quieren que les diga? Con él estoy aprendiendo más aún. Está encima siempre. Le gusta esto mucho.
¿Por qué le fichó? ¿Es que se salió contra el Hércules?
Hice muy buen partido con el Nástic en Tarragona y quizás me vio ahí. En la primera parte íbamos ganando 2-0 pero ellos nos remontaron en la segunda. Fue un partido muy bonito pero no guardo buen recuerdo.
No le gusta nada perder...
Nada. Soy muy competitivo.
La gente conoce poco a Diop. ¿Dónde y cómo comenzó usted a jugar al fútbol?
En Senegal, pero en Europa empecé en Francia. Fue en el juvenil del Rennes. A los 16 años me llevó un ojeador. Allí estuve hasta ser profesional. Firmé a los 19, me cedieron a un equipo de Segunda, no me renovaron. Y de este equipo me fui a Tarragona.
¿Solo o acompañado?
Con mi novia. Soy el mayor de mi familia. Tengo parte de ella en Senegal y primos y tíos en Francia. Aún no han venido. Mi padre no quería que fuese futbolista, me dijo que tenía que estudiar y que, sólo si traía buenas notas, podría hacerlo. Al final me dejó porque cumplí con el trato. Me gustaba estudiar pero siempre tuve claro que quería dedicarme al fútbol.
Dicen que el Nàstic pagó por usted unos 20.000 o 30.000 euros. ¿Es cierto?
No sé cuánto fue, pero no pagó mucho. Me quedaban seis meses en Francia y yo quería irme, pero no me dejaban. Por eso pagaron tan poco. Llegué por un ojeador del equipo y por mi agente.
¿Por qué quiso irse tan pronto de Francia?
Estaba lesionado en esos momentos y lo estaba pasando mal. Quería jugar en Primera. Yo jugaba en Segunda, y el equipo luego bajó a Segunda B y yo no quería quedarme de nuevo en esa categoría. Necesitaba dar el salto. Pienso que tenía más nivel.
¿Y ahora está a la altura del Racing? ¿Hay mucho salto de Segunda a Primera?
El nivel es muy bueno. A pesar de que ha habido alguna derrota, este Racing tiene muy buena pinta. Hay que tener tranquilidad. La diferencia que encuentro es que en Primera los pases son más arriesgados, el juego es más rápido. Un error se paga caro. Pero no hay tanta diferencia.
Se le ve muy adaptado a España. ¿Qué es lo que más le gusta de nuestro país?
La comida (risas). Me gusta todo, pero especialmente las tapas. Me han dicho que Santander es buen sitio.
Ya habla muy bien español. ¿Va a clases particulares?
No. En Francia no hablaba castellano, y en Tarragona tuve que aprender, si no el míster no me tenía en cuenta. Eso sí, de catalán nada.
¿Quién le está ayudando más a adaptarse aquí?
Bueno, Delfín me está ayudando a encontrar piso.
¿Conocía a algún jugador de esta plantilla?
El año pasado me enfrenté con Geijo y Juanjo en Segunda y conocía a Sepsi porque jugamos juntos en el filial del Rennes. A Mehdi Lacen también lo conocí antes.
Pues con él tendrá que pelear duro por un puesto...
La competencia es muy buena. El Racing sale ganando. Puedo jugar junto a Lacen. A mí me han puesto en todas las posiciones. En el Nástic jugaba casi de mediapunta...
¿En qué campo le hace más ilusión jugar este año?
En el Camp Nou. También en el Bernabéu, pero tengo más ganas en Barcelona. No he ido allí nunca. Estuve a punto de ver un partido de Champions, pero al final no pudo ser.
¿Cuáles son sus objetivos?
Quiero hacer una muy buena temporada y seguir mejorando. En el plano colectivo, hay que hacer un gran año, ganar los partidos en casa y hacer buenos resultados fuera. Hay que conseguir la permanencia lo más rápido posible. Eso da estabilidad al equipo y al club.
¿Cree que ha alcanzado su techo aquí o aspira a más?
Ése es mi objetivo. Soy ambicioso, pero hay que hacer las cosas poco a poco. Primero tengo que lograr en el Racing un puesto y triunfar.