Filipe presiona y no se hace la foto de plantilla

Filipe Luis da un paso más. Su primera medida de presión fue reunirse hace unos días con Lendoiro en Madrid para decirle que le traspasase al Barcelona y ayer se negó a hacerse la foto de plantilla con el resto de sus compañeros. El brasileño no se siente parte de este equipo, quiere irse como sea al conjunto culé y por eso decidió ayer no dejarse ver en la foto de familia con el equipo que aún tiene contrato y con los compañeros que comparte vestuario.

Esta instantánea estaba planificada para la tarde y, en un principio, saltaron todos los futbolistas de la plantilla al césped, incluido el personal técnico, médico y de fisioterapia. El brasileño fue requerido en más de una ocasión e incluso el jefe de prensa, Rafael Carpacho, entró en el vestuario para intentar convencerle de que depusiese su actitud, pero fue imposible. Tras esta nueva negativa, posó toda la plantilla sin él.

La versión del club coruñés sobre lo ocurrido en el momento de realizar la foto es idéntica, aunque no quiere darle demasiada importancia. El Depor está bastante molesto por la actitud del lateral, pero en un principio no le abrirá un expediente disciplinario ni le impondrá una multa por lo que ha hecho ya que no es la foto oficial del equipo, que sí se realizará cuando la plantilla esté cerrada en los primeros días de septiembre.

Filipe Luis se negó a posar, pero no a ejercitarse a las órdenes de Lotina y Edu Domínguez. El brasileño realizó las pruebas médicas por la mañana y luego saltó al césped de Abegondo para trabajar, aunque se le vio mucho menos activo que el resto de sus compañeros, una situación casi calcada a la de Ángel Lafita. Al brasileño se le pudo ver solitario y hundido mientras realizaba su primera sesión matutina. Algo parecido ocurrió por la tarde tras la negativa a la foto. Acto seguido, el lateral se unió al resto y se entrenó, pero con muy poca intensidad.

Muy solo.

Más allá de haber cumplido con sus obligaciones contractuales sobre en el terreno de juego y de negarse a posar, a Filipe se le vio triste y derrotado durante toda la jornada. Lafita, que pasa por una situación muy similar, parece ser el único apoyo real en el vestuario e incluso los dos futbolistas comparten el día a día de sus problemas y acuden juntos a entrenarse en las instalaciones de Abegondo.