Oltra es el preferido para reflotar la nave albiazul

Adiós a Primera, hola a Segunda. Casi sin tiempo para digerir el descenso a la categoría de plata tras una temporada para olvidar, el Consejo de Administración del Recreativo ya se ha puesto manos a la obra para perfilar el nuevo proyecto albiazul. Y la primera pieza y principal será la contratación del nuevo entrenador, que el club quiere anunciar incluso a finales de esta misma semana.

Era un secreto a voces que Lucas Alcaraz no iba a seguir al frente de la nave albiazul y el Decano ya maneja una lista de varios nombres en la que el primer puesto en las preferencias lo ocupa un viejo conocido: José Luis Oltra. El actual técnico del Tenerife, con pie y medio en Primera, se ajusta al perfil de entrenador joven, cualificado y con proyección que busca el conjunto onubense para su nuevo proyecto, aunque dado lo que se está jugando el equipo tinerfeño difícilmente la operación podría llegar a buen puerto en los próximos días.

Además, y aunque acaba contrato el 30 de junio, el propio José Luis Oltra ya ha insinuado en la Isla su intención de volver a dirigir al cuadro chicharrero en Primera División, donde tiene una espina clavada tras su efímero paso por el Levante, cuyo descenso no pudo evitar tras suplir a Schuster.

Sin embargo, tampoco sería descabellado que el técnico valenciano pudiese sopesar la posibilidad de negociar si el Decano es capaz de ofrecerle un proyecto ambicioso y de garantías. De hecho, José Luis Oltra ha reconocido en su círculo íntimo que se siente en deuda con el club onubense, al que dejó en la estacada en dos ocasiones, la primera tras su etapa como técnico del Castellón, que abandonó para dirigir al filial del Levante, y la segunda en la campaña 05-06, antes de la contratación de Marcelino García Toral.

Más nombres. A pesar de que el actual entrenador del Tenerife es a día de hoy el que más gusta en el seno del Consejo onubense, no es el único técnico en la agenda y la complejidad de la operación ha propiciado que el club haya valorado otras alternativas, entre las que destacan Juan Carlos Mandiá y Gonzalo Arconada, todos ellos ajustados al perfil de entrenador "exigente, muy exigente" que el presidente, Francisco Mendoza, quiere en el vestuario.

Mendoza: "Si estorbo, me voy"

El presidente aseguró que el descenso "no es una tragedia", sino "un pequeño accidente, un resfriado". "Son cosas normales, entra en el guión le duela a quien le duela y lo que hay que hacer es mirar al futuro", dijo Mendoza, quien se mostró dolido con la reacción de gente que "parece que deseaba que bajáramos. Ahora deben aparecer los verdaderos recreativistas. Si estorbo me voy tan a gusto a casa". No obstante, admitió que se equivocó cuando garantizó la continuidad de Zambrano una vez lograda la permanencia y que no volverá a cometer el mismo error. "Habrá una auténtica revolución en el equipo", subrayó Mendoza.