Las Palmas desactiva el ataque de un soso Nàstic

Dos no juegan si uno de ellos no quiere. Ese fue el resumen del empate sin goles entre el Nàstic y la Unión Deportiva en uno de los partidos más aburridos del 2009. Las Palmas llegó a Tarragona con la intención de no perder, de destruir la creación del Nàstic y evitar que sus desequilibrantes jugadores de ataque recibieran en buenas condiciones. "Para nosotros era importante sumar", dijo Vidales. Se salió con la suya. El Nàstic, espeso, sin chispa, como reconoció Latasa, evidenció su falta de velocidad en el juego. La pareja Diop-Bauzà destruye y le da equilibrio defensivo, pero las transiciones son muy lentas. Si a ello se le suma el buen trabajo defensivo de los amarillos y el mal día de N'Gal y Víctor, brota el mismísimo cloroformo.

Así transcurrió la primera mitad, entre bostezos y bolsas de pipas devoradas. El Nàstic no tiró entre los tres palos. Rubén sacó un mano milagrosa, como si se tratase de un tapón en baloncesto, a remate de Marcos Márquez, un imán en el área. La entrada de Alba por Redondo le dio más profundiad al Nàstic, aunque, en la banda contraria a su juego, no es tan peligroso. La Unión Deportiva se echó más para atrás y dejó de presionar la salida de balón. Los grana combinaron con más fluidez, como denota las ocasiones de Jandro (55') y de Diop (86'), pero no hubo manera. El general David García controló la marea grana. Incluso el destino es tan caprichoso, que la Unión estuvo a punto de encontrarse con el premio de la victoria. Un rechace después de un córner estuvo a escasos centímetros de colarse en la meta de Rubén. Hubiese sido un excesivo premio para los canarios, pero una recompensa a su excelente defensa.

El Nàstic reclamó un penalti por agarrón de Dani López a Jordi Alba en el 83'. El penalti fue tan claro como que el empate de ayer es bien recibido en Las Palmas, que se acerca cada vez más a la salvación. El Nàstic aún no la tiene asegurada pero su situación no peligra, sí su entorno, dormido por la falta de aspiraciones de una súper plantilla familiarizada con la irregularidad.

Latasa: "Faltó alegría y chispa en ataque"

"A ellos les servía el punto y por eso nos costó mucho cuando llegamos a los tres cuartos de campo. Lo positivo es que no recibamos goles. Lo normal es que el equipo hubiese marcado un gol. Fue un encuentro muy trabado porque nos apretaron arriba. Faltó fludiez, chispa, sobre todo en las bandas, y ellos han salido beneficiados. Faltó algo de alegría, como la velocidad de N'Gal o el talento de Jandro. Medina es un buen central y nos aporta muchas cosas. Tuvimos el encuentro muy controlado, pero fallamos en la zona de ataque. A seguir".

Vidales: "No podíamos perder este partido"

"Hicimos un gran trabajo en todos los aspectos. El Nàstic intentó ganar con todo. No cometimos errores y por segunda semana seguida logramos mantener la portería a cero. Quisimos ganar, pero el empate fue justo. El punto es bueno, aunque de antemano ya sabíamos que era fácil. Hay mucho en juego y el Nàstic es un equipo importante. Si hubiese tenido una buena racha, se habría apuntado a la zona alta. Este encuentro era importante y no podíamos perder con tal de mantener el margen de puntos con respecto al descenso. N'Gal y Víctor eran muy peligroso".