El Consejo grana espera otra reacción inmediata

Siete puntos por encima del descenso, y a nueve ya de la zona de ascenso, el Nàstic sigue en su particular limbo y los resultados, cuatro puntos obtenidos de los 18 últimos, vuelven a instalar la preocupación en el Consejo grana.

A día de hoy, el cargo de César Ferrando no corre peligro, pero el club espera una reacción inmediata en las próximas tres jornadas, ante rivales de la zona media baja de la tabla, como Alicante y Albacete, y frente a uno de los aspirantes al ascenso, el Salamanca. El Consejo ha hecho una notable apuesta en el mercado de invierno para intentar darle un salto de calidad a la plantilla, que es una de las más competitivas de Segunda. Pero el equipo grana sigue sin traducir la calidad en rendimiento después de 24 jornadas disputadas.

No sólo los resultados inquietan al Consejo, sino también sus consecuencias. Una de ellas es la frialdad del Nou Estadi, que no acaba de engancharse a un Nàstic que da una cal y otra de arena.

Esta temporada, la afluencia de espectadores al Nou Estadi se ha ido reduciendo, hasta llegar a una cifra que no supera las 5.500 personas. Es más, hay síntomas, como la sonora pitada que se llevó Óscar Arpón el sábado, que denotan la falta de química entre grada y equipo, un binomio que debería ser indisoluble y que fue clave en el ascenso en la temporada 05-06.

El presidente Xavier Salvadó hablará esta semana con el técnico para intentar reconducir la situación del equipo. La última vez que Salvadó hizo una declaración pública (que el entorno grana tomó como un ultimátum) el Nàstic ganó tres encuentros seguidos y se colocó a tiro de piedra del ascenso. Todavía quedan 18 partidos para acabar la Liga. Sí, un mundo. Pero el Nàstic está durmiendo y debería despertar ya.