Copa del Rey | Atlético de Madrid - Barcelona
Sin Kun, Etoo, Xavi y Puyol, pero con todos los demás
Las rotaciones de Atleti y Barça marcan el duelo estrella de la Copa
Aguirre jugó fuerte ayer y anunció que Agüero sería suplente en el esperado Atleti-Barça de esta noche. Guardiola vio la apuesta y la subió dejando en casa a Etoo, Xavi, Valdés y Gudjohnsen por motivos técnicos y Puyol, Márquez y Hleb por razones médicas. Pero ni de lejos es lo mismo. Pep salta con red, el Vasco, al vacío.
Porque la afición rojiblanca ya estaba calentita tras la espantada de Mestalla, con Maxi y Maniche viéndolo por la tele en Madrid, y hoy, día de Reyes, los padres que llevan a sus niños al Calderón ilusionados con ver al Kun pedirán la cabeza del entrenador mexicano como el triple mortal le salga rana. A veces da la sensación de que Aguirre confunde valentía con temeridad. De iluminados que se creyeron héroes están llenas las necrológicas.
Lo de Guardiola es diferente. Para empezar, en el lugar de Etoo entra Iniesta, que jugará a la izquierda recolocando a Henry como ariete, así que lo que pierde en gol lo gana en ingenio. Más le vale, eso sí, que el manchego no se encalle en la banda, tentado con liársela una y otra vez a Seitaridis, y aparezca mucho por el medio para convertirse en el faro que le falta a este Barça sin Xavi. Si existe alguien en este mundo capaz de disfrazarse de Xavi es Iniesta. Si existe...
Más complicado le resultará al Barça salvar la revolución defensiva, sin sus centrales y portero titulares. Pinto siempre se lució con el Celta ante el Atleti, aunque hay que ver si el banquillo le ha oxidado. Y Piqué y Cáceres tienen el futuro a su merced, pero hoy por hoy no son Puyol y Márquez. Además, aun sin Agüero, Forlán, Simao y Maxi siguen formando un ataque de lujo.
Porque aunque las ausencias brillen, lo que queda puede deslumbrar. Por encima de todo está Messi, bien descansadito tras las vacaciones y no jugar el sábado. Si es temible cansado, con los ojos vendados y una pierna atada a la otra, en estas condiciones es terrorífico. Además, Aguirre también dará descanso a su mejor defensa, Ujfalusi, dejando al supersónico Perea para apagar los fuegos que puedan provocar sus socios (Seitaridis, Heitinga y Antonio López), consumados pirómanos.
Pero que nadie haga pronósticos, juega el Atleti. Me decía el compañero Fabián Ortiz, con gracia y acierto, que el Atleti es como la niña de El exorcista, que cuando te acercas no sabes si va a darte un beso o a vomitarte. Si encima se enfrenta al Barça, el factor veleta se multiplica por diez.
Argumentos.
Siguen teniendo los rojiblancos dos especialistas en liársela al Barça: Forlán le ha marcado seis goles en seis partidos y Maxi, tres desde que está en el Atleti. A ellos se suman un Simao a años luz de aquel que llegó al Camp Nou siendo un niño: hoy es uno de los mejores extremos de Europa. Y vuelve Maniche, al que la debacle de Valencia demostró imprescindible, con su caos, sus lagunas y toda la pesca.
Por si fuera poco, está el recuerdo del 6-1 y las ganas de revancha que todos niegan tanto como sienten, el primero Coupet, titular hoy. Y, de postre, Iturralde, siempre dispuesto a montar una performance. Y si esto no basta, siempre puede emerger Kun del banco ante el delirio de la grada. Conclusión: faltan algunos, pero queda un Atleti-Barça de los de siempre, un espectáculo imprevisible.
Aún quedan 900 entradas a la venta, pero se espera lleno
El Atlético está convencido de que el Calderón se llenará esta noche, pero aún quedan 900 entradas disponibles, a partir de 40 euros la más barata. Las taquillas del Manzanares se abrirán hoy a las 11:00 horas y permanecerán operativas hasta la hora del partido o hasta que se acaben las localidades que restan. El ritmo de venta ha sido sobresaliente, ya que salieron 11.000, gracias al nivel del rival, el día festivo y la hora (20:00) razonable para los niños.