La mentira de Schuster no gustó a la directiva blanca

Ante casi un centenar de periodistas, Bernd Schuster declaró en San Petersburgo que iba a alinear, ante el Zenit, el mismo once que jugó frente al Betis. De esta declaración alevosamente incierta se desprendía que Raúl sería titular. No fue así. El técnico había engañado a todos, pero no sólo a los espías del equipo rival y a los informadores, sino también a la directiva madridista, que no entendió esta estrategia innecesariamente equívoca del entrenador, perjudicial una vez más para la buena imagen del club.

En la mañana del martes, día del partido, la directiva no tenía filtración alguna sobre el once que iba a disponer Schuster. Tampoco nadie lo había requerido, pues al técnico se le concede independencia absoluta en este sentido. La noticia que llegaba de boca de Schuster y supuestamente fiable, es que en la alineación estaría Raúl, lo que provocaba un debate interno a favor y en contra.

Durante el paseo matinal por el Hermitage de San Petersburgo, el presidente Calderón comentaba que no había razón alguna para que Schuster estuviera mintiendo a la prensa y, por extensión, a la afición madridista cuando anunciaba que repetiría alineación. Y también consideraba que en caso de ser un 'farol', iba a ser muy difícil de entender por parte de la opinión pública, pues no había razones para engañar y le hubiera bastado con esquivar la respuesta diplomáticamente ante los informadores.

La preocupación de los directivos se fundamentaba en que Schuster volvía a tensar la goma de manera gratuita, cuando el club está en una política de buenas maneras y transparencia. Mentir en una conferencia de Prensa internacional, con todo el madridismo detrás pendiente de lo que transmiten los medios, no contribuía a la buena imagen del técnico y, por extensión, del club.

Efectivamente, los cronistas internacionales se preguntaban en San Petersburgo si Schuster acostumbraba a dar pistas falsas o fue sólo con ocasión del Zenit y para zanjar los comentarios en torno a Raúl. Tras el partido, el alemán desveló que tenía pensado desde el día de Sevilla que Raúl 'rotaría' en Rusia y dejó entrever que será titular en el Bernabéu, frente al Espanyol. Una idea muy respetable. Pero nadie se explica por qué mintió en San Petersburgo.