Un Murcia de Primera... para salirse en Segunda

Cuando todavía restan cuatro semanas para que el Murcia de Clemente inicie su trabajo de pretemporada (el plantel está citado para el 10 de julio en Murcia) la secretaría técnica grana ya ha cumplido con el doble objetivo que el propio Clemente planteó en el preciso instante en el que Samper le confirmó como patrón de la nave grana para los próximos tres años: cambiar la cara al equipo y además hacerlo con celeridad. Todas las líneas del equipo ya han sido alimentadas con nuevos futbolistas y sólo restan por llegar un segundo guardameta que pelee con el madrileño Roberto la titularidad, una pareja de centrales que secunden a los especialistas Mejía y Ochoa y a los eventuales Pignol, Marañón y Lillo y un futbolista de banda que se sume a los veteranos De Lucas, Jofre, Aquino y a los recién firmados Cuéllar y Núñez. Si no se produce alguna salida no deseada (en este capítulo coloquen al cotizado Aquino y al siempre valioso Iván Alonso) el Murcia de la reconquista estará listo para que Clemente empiece a darle forma desde el primer día de la pretemporada. Una circunstancia muy favorable lograda sin tener que pagar más que el millón y medio largo 'recolectado' por el Rapid de Bucarest por Despotovic. El resto de novedades llegan, o bien con la carta de libertad (Cuéllar, Sikora y Núñez) o en calidad de cedidos (Lillo, Montoro y Roberto).

Bajo coste. El perfil de los recién firmados arroja también un descenso notable en el coste de fichas (sólo se salen de éste rol Núñez, Despotovic y en menor medida Cuéllar) y permite rejuvenecer el plantel. Otra de las obsesiones de Clemente. En el apartado negativo sólo la inexperiencia de la mayoría (salvo Núñez y Cuéllar), que contrasta con el patronaje del último Murcia de Segunda, el que logró el ascenso más rápido de la historia y el que será una suerte de referencia para el de Clemente. El siguiente reto pasa por colocar a no menos de una docena de futbolistas sin sitio.