Primera | Almería 1 - Villarreal 0
Acasiete despeja la Liga y reivindica al gran Almería
El Villarreal, mermado sin Diego López, estuvo muy gris
Hay oscuras historias personales que pasan de puntillas sobre guiones de colores. Una es la de Santi Acasiete, abatido y anónimo central peruano que era el rey del mambo en Almería hasta que la prensa de su país, muy amarilla ella, descubrió una nocturna salida multitudinaria de toda la selección de Chemo del Solar después de un meritorio (y festejable) empate ante Brasil en Lima. Depuradas responsabilidades, Pizarro y compañía se fueron de rositas y Acasiete se tragó una sanción indefinida que coincidió con su salida del once inicial de Emery. Su gesto anoche, tan raulista, después de marcar el gol que despeja la Liga para que precisamente Raúl levante la copa de campeón, era una reivindicación. De capitán y de buen profesional. Esta es la revancha del fútbol.
Por el mismo túnel en que se había metido Acasiete circuló ayer el Villarreal, que al cuarto de hora se vio desarmado por la expulsión de Diego López, torpe en un control que debió ser despeje, y víctima de una cesión indecente de Javi Venta. Movido por el descontrol, Diego se llevó por delante a Crusat, que había mandado el balón al Zapillo. La expulsión admitía discusión. El penalti, no, pero Negredo lo mandó al limbo, así que el asunto quedó 0-0 y todo el partido por delante. El plan de Pellegrini, entrenador bien considerado por la crítica, resultó decepcionante. Esperó atrás y, liderado por el extraordinario Gonzalo, se defendió bien. Pero le faltó grandeza. Todo lo contrario que al Almería, que asumió la superioridad numérica y se lanzó a por el partido poniéndose unas obligaciones de grande que casi ni le corresponden.
Su arrojo tuvo premio al final, cuando había olvidado casi que lo merecía. El gol de Acasiete premió la bella historia del Almería, que con la salvación garantizada sólo se permite la incertidumbre de desconocer el futuro de su enigmático entrenador, que es un prodigio de ambición. Al equilibrado Pellegrini, que discutió al final el indiscutible gobierno del Almería, le sobró una dosis de hiperrealismo. Dijo en Sevilla que el Villarreal no luchaba por el título. Y era cierto. Igual es su receta para vivir tan arriba. Y es respetable.
Pellegrini: "El Almería no nos hizo peligro"
"La expulsión resultó determinante porque el partido se nos complicó pero no tuvimos problemas. Apenas llegó al arco nuestro y en un córner tonto se llevaron el partido. Luego tuvimos ocasiones. El Almería, con un hombre más, no nos produjo peligro. Todas las derrotas afectan. Tenemos que jugar en casa ante el Valadolid y la pelea es sumar la mayor cantidad de puntos para ver hasta dónde podemos llegar".
Emery: "Un premio a la constancia"
"Creo que la victoria ha sido el premio a la constancia. Intentamos mantener nuestra filosofía. El equipo ha sabido tener bien el balón, crear superioridad y ha hecho una lectura buena. La expulsión de Diego López creo que era justa. Creo que tengo que afrontar las situaciones con naturalidad. El club está creciendo y los que estamos en el entorno cercano nos beneficiamos mucho de que el Almería esté en Primera".