"No vengo al Barça por rencor al Real Madrid"

Con el rostro cansado, trajeado (pero sin corbata) y con la ilusión de haber llegado "al mejor club del mundo", Gabi Milito se enfundó por primera vez la camiseta del Barça (al menos públicamente). Lo hizo con la satisfacción de "haber cumplido un sueño" y tras semanas de duras negociaciones, al central se le abrió la oportunidad de demostrar a todo el mundo que sí está capacitado para guardar la portería y los colores de uno de los clubes con más solera del mundo.

Hubo morbo en la cita. Más de uno quiso meter mano y hurgar en la herida (más humillante que dolorosa) que ha sufrido el futbolista en su carrera: la revisión médica que liquidó cualquier posibilidad que el menor de los Milito se vistiera con la camiseta del Real Madrid hace ya cuatro temporadas (¡como pasa el tiempo!). Pero fiel a su estilo, el defensa salió al corte: "Mientras estuve en la revisión, nunca pensé en el reconocimiento que pasé en Madrid y no vengo al Barça por rencor al Real. Lo que me toca es disfrutar de todo esto y estoy muy feliz con lo que me pasa".

Buen amigo de Leo Messi, el cuarto fichaje del Barcelona para la próxima temporada no tenía palabras suficientes para agradecer el esfuerzo que la entidad catalana hizo para poder ponerle la camiseta culé: "Quiero agradecer al presidente y al Barça por haberme elegido. Cumplo el sueño de formar parte de este club. Tengo ganas de que las cosas salgan bien y poder devolver el cariño depositado. Quiero estar a la altura de la entidad, la mejor del mundo".

Comparaciones. Desde que hace una semana el Barça hiciera oficial el fichaje de Milito, se han escrito, visto y oído muchas cosas sobre su juego. Es más, se le ha llegado a comparar con Carles Puyol, su nuevo capitán, que sigue convaleciente de la operación de rodilla a la que fue sometido hace un mes. En este sentido, el defensa argentino aclaró que "no sé si soy parecido o no a Puyol", a lo que añadió que "será un honor poder compartir el día a día con él. Es uno de los mejores defensas del mundo. Cada día, a su lado, podré aprender cosas nuevas. Lo que tengo claro es que vengo a formar parte de la plantilla y a ésta le daré lo mejor de mí. La competencia será muy alta y la decisión, del entrenador. Traigo lo mejor de mí y espero ser útil".

Y para acabar, el futbolista se sinceró. Mientras en Zaragoza más de un fanático aseguraba que Milito no veía con buenos ojos jugar en el Camp Nou y que nunca forzaría su salida de La Romareda, el central puso tierra de por medio y volvió a mostrar su agradecimiento: "Siempre tuve el deseo de jugar de azulgrana y mis allegados lo saben. Apareció el interés del Barça y no lo dudé ni un solo instante. Las razones son obvias. Para los amantes del fútbol, el Barça es el mejor equipo del mundo".

La cuestión es que el Mariscal ya es culé y tiene ganas de arrancar. Lo hará el día 11, fecha en la que el equipo regresará de Asia.