El descenso condiciona todas las renovaciones

Los futuros de Aranburu, Garrido y Kovacevic siguen sin resolverse. Los tres terminan contrato y ahora mismo no continuarían el próximo año en la Real, porque el Consejo todavía no ha tratado sus situaciones contractuales. Aunque en los casos de los dos primeros el club realista tiene una cláusula por otro año más que puede efectuar en el momento que desee. A estos jugadores hay que añadir los temas pendientes de Xabi Prieto y Rekarte, que también tienen pendiente aclarar su futuro. El club tiene aparcados el tema de renovaciones para temporadas venideras, así como otros asuntos relacionados con la Real de los próximos años. El Consejo quiere aclarar primero el futuro de la entidad, si estará el ejercicio que viene en Primera o Segunda, antes de acometer cualquier tipo de planificación.

Desde la Real se insiste en que se cuenta con Aranburu, Garrido y Xabi Prieto. Pero antes de dar más pasos en las negociaciones de sus renovaciones, quieren conocer primero qué pasará con la Real de la próxima temporada. Porque las condiciones que les ofrecerán para sus nuevos contratos variarán en función de si el equipo se mantiene o si desciende. Aunque, eso sí, hay una cosa clara en el club: si no se llega a un acuerdo con Aranburu y Garrido, se les efectuará automáticamente la cláusula por un año más. Primero para evitar una posible fuga al Athletic, y segundo para poder sacar algo en caso de que haya traspaso. Para ello, en el caso de Aranburu, sólo tienen hasta abril. En todo caso, la idea de los dirigentes realistas es negociar en los dos casos contratos por un tiempo más prolongado. Ha habido contactos con ambos, pero no se ha llegado a un acuerdo.

Ahora hay compás de espera. Lo mismo pasa con Xabi Prieto. Al donostiarra le queda otro año de contrato, pero la Real quiere renovarle ya para evitar otro 'caso Nihat'. Hubo negociaciones, pero todo sigue parado, y tal y como están las cosas, el club no lo considera ahora un tema prioritario, porque le queda un año más.

Con Kovacevic no ha habido ningún acercamiento y todo indica que pueden dejarle marchar, aunque un probable descenso cambiaría las cosas. Dada su experiencia, se podría negociar a la baja con el serbio para que ayude en el retorno. Con Rekarte es distinto. El capitán renovaría automáticamente por otros dos años con 22 partidos jugados. Lleva 20 y el club se pregunta si quiere contar con él. Podría haber sorpresas. En este sentido, la presencia del juvenil Balenziaga con los mayores induce a sospechar. El canterano es un lateral izquierdo y si se decide por no apostar por Rekarte, podría llegar a debutar con el primer equipo, en caso de que Garrido no se recuperara.