Primera | Athletic 1 - Celta 1
El Athletic se deshinchó y deja tiritando a Mendilibar
El Celta mejoró en el segundo tiempo y pudo incluso ganar.
El Athletic acusó ayer su primera jornada como colista esta temporada y no pudo sujetar un partido que tuvo agarrado en la primera fase del encuentro. La mejoría del Celta en la segunda mitad, unido al miedo que atenazó a los vascos, dejó en empate un choque que sustrajo como conclusión, por si alguien no se había dado cuenta, que este equipo sufrirá mucho.
Aún así, el Athletic insinuó de principio que aún conserva sus garras. Desafiladas, eso sí. Y las muestra mucho más cuando está Urzaiz sobre el campo. El delantero navarro se encargó él solito de partir en dos la defensa celtiña en la primera mitad. Peinó -como siempre- todo balón que asomó por sus cercanías, chocó con los centrales hasta dejar groggy a alguno, en este caso Sergio, y convirtió el juego de su equipo en algo directo y punzante.
Ni tan siquiera lo previsible del estilo hacía que los vigueses encontrasen una solución y el gol de Gurpegi fue el mejor ejemplo a esta especie de caos. Mientras, en la otra punta del campo, los Silva, Canobbio, Núñez y compañía seguían dándole vueltas a una fórmula que permitiese poblar más el área contraria. De momento, su juego al toque, en corto y siempre al pie no daba los resultados necesarios, entre otras cosas porque en el centro del área no había un delantero como tal, un ariete puro que pudiese resolver las buenas triangulaciones de los mediapuntas celestes.
El Celta tenía ganas de juerga, pero no contaba con dinero en su cartera. Y en esas apareció el buen corazón del Athletic, que gentilmente se lo prestó. Había fiesta. Si por regla general los equipos que están en la zona baja de la clasificación tienen problemas en defensa, los de Mendilibar los multiplican. Así, Lacruz, nada más comenzar la segunda mitad, le puso el gol en bandeja a Jonathan. Su tiro, sin embargo, se fue al larguero, pero puso el nudo en la garganta de todo San Mamés. Tocaba sufrir.
Miedo.
Poco a poco la agonía se fue haciendo mayor a medida que el Celta se puso en faena con el objetivo claro de empatar. Y en esas, Ángel, haciendo de improvisado delantero centro, logró el empate. No sorprendió a nadie, la verdad, y de paso animó al Celta a ir a por el partido. Al Athletic, a todo esto, ya le temblaban las piernas de manera alarmante. Y más le temblaron cuando Canobbio se plantó ante Aranzubía y tiró fuera. Hubiese sido demasiado castigo, pero sirvió de aviso. O se ata bien los machos, o este Athletic puede hacer historia.
Algunos mostraron su apoyo al técnico vasco con pancartas
No son buenos tiempos los que está viviendo José Luis Mendilibar y ayer sufrió un nuevo episodio del sufrimiento que está viviendo en el banquillo del Athletic. Sin embargo, antes de comenzar el encuentro recibió el apoyo de buena parte del público que acudió ayer a San Mamés a animar a su equipo. Varias pancartas, entre ellas una que decía "Ánimo Mendi, esto no ha terminado" lucieron en las gradas del estadio, aunque fueron desapareciendo a medida que el partido avanzaba. El técnico del Athletic ya comentó esta semana que estaba viviendo un mal momento, pero que en ningún momento había pensado en dimitir. Pancartas como éstas seguro que le animaron, aunque viendo el juego de su equipo más de uno pensará que se trata de un error.