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Yo digo | Carlos Cariño

Entre Einstein y Chaplin

Hace mucho tiempo, Albert Einstein, eminente físico, teórico de la relatividad espacio-tiempo, coincidió en un evento con Charles Chaplin, por los siglos de los siglos Charlot. Einstein le dijo al compositor de Candilejas: es usted increíble, todo el mundo le admira y le entiende. La respuesta de Charlot fue memorable: más mérito tiene usted, todo el mundo le admira y nadie le entiende. Años después, irrumpió en el planeta un mago que aglutinó las condiciones de Charlot y de Einstein. Todos le admiraban, pero muchos, no siempre le comprendían, hasta que pasado el tiempo, todo lo incomprensible, tenía y adquiría su razón de ser. Así son los genios. Porque Jorge, en su faceta de actor, siempre interpretó a las mil maravillas un hermoso rol: el fútbol como arte, y al mismo tiempo, en su faceta como científico, interpretaba la teoría de que el balompié es universal a través del tiempo. Futbolistas como él nunca pasan de moda. Mágico sigue soñando con el Cádiz y creo que le gustaría entrenarlo algún día, en mi opinión lo haría de cine, y es que tiene los ingredientes que hicieron geniales a Einstein y a Charlot. Irrepetibles.