Mundial 2002 | España
Javier Lozano: "No estoy aquí de palmero"
"Un día Camacho me cuestionó sobre la posibilidad de estar aquí. Si me apetecía y si estaba preparado. Por supuesto, le contesté que sí".
Javier Lozano, seleccionador español de fútbol sala y miembro del cuerpo técnico del equipo de José Antonio Camacho en Corea del Sur, ha reivindicado la importancia de su presencia en el Mundial al señalar que no está "de palmero", sino por sus diez años de experiencia en la Federación Española de Fútbol.
Lozano ha compartido con un reducido grupo de periodistas un buen rato de charla, durante la que desmenuzó las razones de su inclusión en la lista de expedicionarios españoles a Corea, hecho que ha causado críticas y debates.
"Es tan sencillo como que un día Camacho me cuestionó sobre la posibilidad de estar aquí con ellos. Me preguntó si me apetecía y si y si estaba preparado y por supuesto le contesté que sí. En tres minutos se fraguó el asunto", dijo Lozano, actual campeón del mundo y de Europa con la selección española de fútbol sala.
Lozano ha obviado los posibles debates que su presencia en la selección haya podido crear. "Cada uno tiene sus opiniones. Ese es un tema que obedece al campo del periodismo y en el que ni entro ni salgo".
En principio, la función de Lozano en el Mundial será la de analizar los rivales de España para facilitarle informes a José Antonio Camacho, aunque, ha indicado, que puede contribuir también "en otras muchas cosas".
"Camacho no es caprichoso ni tiene un pelo de tonto y si estoy aquí es por algo ", dijo Lozano, quien añadió que su presencia, incluso, puede crear un precedente. "En algún sitio he leído que Camacho es un tío adelantado y lo mismo ha inaugurado algo", ha señalado Lozano, quien no obstante aclaró que tiene los pies en el suelo y que es un hombre de fútbol sala, aunque está abierto a cualquier colaboración.
Amante del deporte
Ha expresado su interés por el deporte en general, del que ha reconocido que acumula conocimientos. "Cuando coincido con algún deportista o entrenador de otra disciplina me lío a hablar con él e intercambiamos muchos conceptos. En la vida hay que aprender de todo el mundo".
Lozano explicó que "los conceptos del fútbol sala y el fútbol grande son los mismos" y que tan solo varían los métodos de entrenamiento. "Yo no vengo a entrenar, sino a aportar mis conocimientos. Llevo diez años como técnico de la Federación y he escrito libros y me he cansado de montar vídeos para estudiar a los rivales. Puedo aportar muchas cosas, aunque el día a día irá dictando mi función. Soy un colaborador del cuerpo técnico", ha aclarado.
Se encuentra bien
El técnico de fútbol sala ha manifestado que se encuentra muy identificado en el grupo y que los jugadores lo han aceptado como uno más. Ha considerado que no existen diferencias en la forma de ser de los jugadores de su deporte y las grandes estrellas de balompié, al contrario de lo que se pueda pensar.
"He encontrado que son todos unos chicos excepcionales. No encuentro diferencias entre la manera de ser de estos jugadores y los de fútbol sala. No se lo tienen creído y no son menos humildes, los que pasa que de la identidad a la imagen que se proyecta a veces hay un trecho", indicó.
Donde sí encuentra diferencias Lozano es el aspecto físico. "El deportista de fútbol sala es más delgado, aunque ya en todos los deportes se tiende a ser más fibroso y con menos porcentaje de grasa, pero los de fútbol sala no tienen músculo. Son mucho más delgados".
Preguntado por sus éxitos en su deporte y la escasez de ellos en el fútbol, dijo que en sus diez años al frente de la selección de fútbol sala ha tenido tiempo, tranquilidad y confianza para "construir el edificio".
"En este Mundial soy cola de león y tengo que saber ejercer para lo que me han encomendado, pero soy realista y tengo los pies en el suelo. Soy un hombre de fútbol sala y sé que mi sitio está ahí, aunque estoy aquí para aportar mis conocimientos y colaborar en muchas cosas", concluyó. Lozano.