COPA (SEMIFINALES, VUELTA) | ATHLETIC 3 - ATLÉTICO 0
1x1 del Atlético: una defensa deshecha, un equipo entregado
Terrible nivel de la retaguardia y nula pegada. Sin Griezmann no hay juego arriba, sin Giménez no hay intensidad atrás. Lino y Riquelme, los que más lo intentaron.
Oblak: Sin capacidad de reacción ante el remate de Iñaki Williams en la primera llegada del Athletic. Demasiadas veces el primer tiro del rival es gol, con una defensa poco ganadora y un Oblak que ya no hace tanto milagro. También el segundo remate fue para adentro, con Nico empujando en el área pequeña. Solo ante el peligro. Despeje al medio en el tercer gol. Tampoco pasa por un buen momento.
Nahuel Molina: Nueva oportunidad en el once pese a que no pasa por un buen momento. Nico Williams le buscó, es muy habilidoso y ganó línea de fondo para asistir a Iñaki. La defensa hace aguas ante ataques intentos y veloces. No fue capaz de parar a Nico, noche muy amarga para Nahuel y toda la retaguardia.
Savic: Una zaga que no gana duelos ni está bien colocada, a años luz de aquella muralla infranqueable en la que participó Savic. Poca comunicación, un balón dividido fue a chocarlo a la par que Witsel y en el segundo gol Nico remató entre cuatro defensas sin que nadie llegase a taponar su presencia en el área pequeña. Guruzeta también remató solo para hacer el tercero.
Witsel: Toda la defensa se vio sobrepasada. Sin Giménez, se pierde garra, intensidad y un defensa ganador de duelos, pero es muy habitual jugarse las castañas sin él. Y Witsel está en una gran temporada, pero tampoco pudo darle esa solvencia a una zaga que se deshace cuando la atacan con espacios.
Hermoso: En la ida fue Reinildo y en la vuelta Hermoso, pero ambos sufrieron una barbaridad con la movilidad de Williams. Vio la amarilla antes de la media hora por intentar frenarle hacia adelante y en la siguiente fue retrocediendo hasta permitir a Iñaki plantarse en área pequeña y ceder a Nico. Nadie marcó al delantero en el segundo palo para marcar en la primera llegada bilbaína. La defensa sufrió cuando el Athletic corría con espacios y Hermoso fue uno de los grandes damnificados.
Lino: Al brasileño nunca le falta intención. Pide la pelota, trata de desequilibrar, entrar por banda izquierda, marcharse en el uno contra uno e incluso encarar a dos rivales... lo que necesita el equipo. Primero en probar los guantes de Agirrezabala, Lino es uno de los pocos jugadores que salen reforzados.
De Paul: Salió bien plantado, intentando generar fútbol, unir líneas, conectar con Correa y Nahuel Molina por banda derecha, pero el equipo se fue descomponiendo por su fragilidad defensiva. No es uno de los señalados en San Mamés, e ha ganado ser indiscutible en el medio esta temporada.
Koke: Los partidos a mucha velocidad le dificultan enormemente el repliegue. La velocidad es su punto débil y la movilidad del ataque bilbaíno y la presencia de Sancet a su espalda le hizo daño. No hay un pivote posicional y físico para este tipo de partidos. Ha bajado su nivel y el equipo lo nota enormemente. No tiene recambio, un grave problema.
Llorente: Situado en el medio, en el perfil izquierdo para colaborar con Hermoso para frenar a Iñaki Williams, no es su perfil más favorable. No pudo llegar al área rival y tampoco ser un tapón para la velocidad del Athletic. Pasó a jugar como carrilero derecho tras la sustitución de Nahuel Molina. Defendió mejor el costado que el argentino.
Correa: Sin la figura de Griezmann, el argentino fue el encargado de acompañar a Morata en punta. Nadie en la plantilla ni probablemente en el mundo puede darle al equipo lo que el francés, tampoco se le puede exigir. Tuvo una ocasión clarísima para meter al Atlético en la eliminatoria, pero remató muy por arriba desde dentro del área. Poca presencia entre líneas.
Morata: Sigue buscando el ritmo perdido desde el inicio del año 2024. La lesión en la rodilla le ha lastrado y el gol se ha escapado justo antes de llegar a la veintena. Sin Griezmann no tiene ese suministrador de balones. Le puso un gran envío a Correa que remató por arriba, poco más que reseñar. El Atlético le necesita al nivel de los primeros meses del curso. Da la sensación de que si dura una hora más el partido el Atleti se marcha sin marcar.
Cambios sin éxito en un equipo entregado
Barrios: Finalmente no fue de la partida, Simeone apostó por la experiencia de Nahuel Molina, pero no le salió bien. Entró en la segunda mitad con el partido muy cuesta arriba y tampoco pudo mejorarlo. De pivote arriesga en exceso cuando intenta regatear de último.
Memphis: Una delantera sin pegada, tampoco se la pudo dar el neerlandés, que probó su disparo de falta directa. Da la sensación de que Simeone no le ve para partidos de intensidad y trabajo, pero no hay nadie fino arriba.
Reinildo: En la ida había quedado señalado por el penalti que desequilibraba la eliminatoria. Pero, en su mejor versión, es necesario para estos partidos. Por intensidad y capacidad de defender hacia delante, lo que le faltó al equipo. El africano todavía no ha encontrado su nivel previo a la lesión.
Saúl: Suplió a Koke ya con la eliminatoria completamente decantada. Le dio piernas a un equipo muerto.
Riquelme: Poco que exigirle, entra en un equipo derrotado, entregado y se entrega por intentar sacar cosas positivas. Buscó el gol en un par de ocasiones, pero nadie es capaz de ver puerta. Exigió a Agirrezabala. Igual hay que verle a la par que a Lino.