Que Didac Ribot no tenía vergüenza ya lo sabíamos, pero este vídeo ha sobrepasado todos sus límites. Si aún no conoces al youtuber, te ponemos en contexto. El joven lleva más de un año subiendo vídeos con cámara oculta en los que se ridiculiza a sí mismo de diversas maneras.

Después de verle interpretando a un camarero sumamente torpe o tumbándose en toallas ajenas en la playa, esta vez el catalán ha apostado por llevar gafas de realidad virtual en la calle. Sin ningún tipo de vergüenza, Didac comienza a jugar a varios juegos mientras se mete en un taxi o incluso interrumpe el tráfico. Y claro, las reacciones de los que viven sus aventuras oscilan entre la risa, la incredulidad o la indignación.

Uno de los mejores momentos llega cuando se topa con una playa y comienza a andar por la arena hasta meterse en el agua hasta los hombros. La playa está llena de gente con jerseys (lo cual nos hace pensar que el agua tendría que estar bien fría), y los que presencian la escena comienzan a aplaudirle y a vitorearle mientras sale del mar.

Pero no contaremos más, merece la pena que lo veas con tus propios ojos. El vídeo ha conseguido más de 360.000 reproducciones y 42.000 'likes' en solo unas horas.