Los veranos de nuestra infancia estaban marcados por mañanas en la piscina, tardes comiendo pipas en la plaza del barrio y noches en las fiestas del pueblo. Y entre acto y acto, siempre había tiempo para vaguear (y sudar) en el sofá viendo una de estas series:

Los vigilantes de la playa (1989-2001)

Mítica. Nadie sabe que hubiera sido de nosotros sin los socorristas de belleza imposible corriendo a cámara lenta por la playa de Santa Mónica. Tal fue el éxito de la serie noventera que en 2017 vivimos una especie de 'remake' en forma de película (y con nuevo reparto, claro). Eso sí, mientras la teleserie se salva por la nostalgia que nos genera, la película no hay por donde cogerla; ni siquiera es entretenida.

El Príncipe de Bel-Air (1990-1996)

Will Smith llevó las riendas de esta sitcom familiar que marcó la década de los 90. La energía que transmitía junto al estricto tío Phil generó miles de chistes que, aunque prececibles, no dejaban de ser divertidos. Y por supuesto no olvidamos al bueno de Carlton ni a su hipnótico baile al ritmo de 'It's unusual' de Tom Jones.

Verano Azul (1981-1982)

Retrocedemos una década en el tiempo para rememorar una de las series españolas más icónicas. Todo niño quiso tener las mismas aventuras que los pequeños que veraneaban en Nerja y escuchaban las batallas de Chanquete.

Xena, la princesa guerrera (1995-2001)

Tal vez te cueste creerlo, pero 'Xena' fue una de las series más populares del momento en Estados Unidos y actualmente es considerada una de las mejores series de la historia por la revista 'TV Guide'. La protagonista, además, se convirtió en todo un modelo de lucha femenina.

H20 (2006-2010)

Seamos sinceros: no hay por donde cogerla. La fantasía sobre las sirenas era poco creíble, los efectos especiales hacían sangrar los ojos y los líos paralelos entre los adolescentes protagonistas eran completamente vacíos. Pero si rondas los veintipocos y desayunabas viendo la tele, seguramente acabaste viendo cada capítulo de 'H2O' tres o cuatro veces (recordemos que cuando no existían los servicios de streaming nos sabíamos las series de memoria).

Heidi (1974)

Volvemos a retroceder en el tiempo, pero 'Heidi' se merece cualquier cosa que pida. La serie japonesa duró décadas emitiéndose en las cadenas más populares de España y la niña que llegó a Los Alpes suizos en verano alegraba a los espectadores tanto como al gruñón de su abuelo.