El crucero del amor de ‘First Dates’ continúa su aventura en el prime time de Cuatro y en esta ocasión, con Mari y Salva como indiscutibles protagonistas de la última entrega. Y es que la cita de ambos será recordada por la audiencia como una de las menos románticas de la historia del programa de Carlos Sobera.

Los dos participantes se presentaron al casting de ‘First Dates: Crucero’ no para encontrar el amor si no para solventar un problema muy crítico tras cuarenta años de matrimonio. Cuando contaron su historia, la producción del programa les dio un billete para subirse al barco del amor más famoso de la televisión y poder retomar su relación. Una vez a bordo, Mari se quejó en varias ocasiones de que su marido miraba para otras mujeres mientras cenaban, en especial a las camareras. “Es que son muy majas”, respondía Salva.

“Yo no digo que no mire a otras mujeres pero que no se recree, que me preste más atención”, decía Mari en tono de queja. A medida que la cena avanzaba, los reproches entre la pareja aumentaban. “No me prestas atención, no noto que me quieras”, repetía ella una y mil veces. “Llevo cuarenta años diciéndote que te quiero”, replicaba Salva.

Al final de la cena llegó la traca final cuando Mari explicaba que se habían enamorado ella con 15 años y el con 18; con muy buena sintonía desde el principio. Ante este comentario, Salva soltaba un contundente: “Bueno, en realidad no, al principio no pero después sí. Es que era una apuesta, no te he dicho nada para que no te enfadaras”. Pese a este duro comentario, él afirmo estar muy enamorado de su mujer. Claro, ahora.

¿Debería Salva habérselo confesado mucho antes?