Corría el año 2003 cuando Antena 3 comenzó a emitir la serie que formaría parte de la historia de la televisión española. Y es que 'Aquí no hay quien viva', siempre con la más pura comedia como guía, nos presentó los problemas más absurdos a los que se enfrentan mujeres y hombres solteros en la treintena, las parejas de jóvenes, los matrimonios más arraigados, los hijos e hijas, los ancianos y, por supuesto, los problemas (siempre exagerados) que se viven en una comunidad de vecinos.

La base para que 'ANHQV' funcionara era un trabajadísimo guion que encajaba al dedillo con unos personajes bien construidos desde la primera temporada. Y dos de los personajes preferidos por los fans de la serie eran Emilio, el portero de Desengaño 21 y Josemi, el niño superdotado y ocurrente que se pasaba el día con hombres que le sacaban más de diez años. Y cuando mezclaban a ambos era pura magia.

Así lo ha demostrado una cuenta de Twitter cuyo nombre irradia nostalgia: 'Aquí no hay quien viva out of context' ha publicado una escena entre Emilio, que acababa de apuntarse a la universidad para intentar ganar algo de cultura general, cosa en la que andaba bastante pobre, y Josemi, que siempre tenía respuestas para todo.

"Ahora estoy con filosofía, pero es que cada uno dice una cosa, es como un culebrón", se quejaba Emilio cuando Josemi le preguntaba por los exámenes. "Sócrates y Aristóteles le dijeron nosequé a Platón y ahora llega Descartes y se pasa a los griegos por el forro de los cojones", concluye. "Es que antes como no había tele la gente se aburría y pensaba", contesta Josemi.

Además de darnos una pequeña clase de filosofía con comedia, la serie tiene el valor de criticar la televisión, que no era otra cosa que su propio método de emisión. Ya lo advertía Vicenta, siempre tan oportuna, en uno de los capítulos de la serie: "Ver la tele es malísimo, lo dijeron el otro día en la tele".